Roma (AsiaNews) - El "martirio" es "el carisma de nuestra Iglesia" en Irak, un país en el cual fe "no es un problema ideológico" sino "una realidad mística" el resultado de "un encuentro personal con Cristo." Por esta razón "los cristianos perseguidos" puede ayudar a nuestros hermanos y hermanas alrededor del mundo a "renovar su fe y su compromiso." Estos son algunos pasajes de la directiva del patriarca caldeo de Bagdad, Mar Louis Sako, en una conferencia celebrada recientemente en Roma, con motivo de la XXVII edición del encuentro internacional de oración por la paz, promovida por la comunidad de San Egidio. Su Beatitud luego destacó la importancia del apoyo de Occidente, que es una fuente de "coraje" para "resistir y permanecer en nuestra tierra y en nuestras iglesias" frente a la persecución y la violencia que casi a la mitad la población de 10 años.
La edición de 2013 de la reunión internacional, celebrada en Roma del 29 de septiembre al 1 de octubre, se centró en el tema: "el coraje de la esperanza - religiones y culturas en diálogo". La reunión contó con 400 representantes de las principales religiones y de la vida política y cultural europea y los representantes de 60 países en todo el mundo. Un evento que renueva el "espíritu de Asís", el destino de peregrinación de ayer por el Papa en los pasos de San Francisco. Entre los temas que cubrió la Conferencia de tres días estuvo el 50 aniversario de la "pacem in terris", la crisis en el Medio Oriente y el papel de las religiones en Asia.
En su discurso el patriarca Sako señaló que "para nosotros los cristianos de Irak, el martirio es el carisma de nuestra Iglesia, que se remonta a más de 2 mil años. Como una minoría, continuamente estamos ante las dificultades y sacrificios, pero somos conscientes de que ser cristiano no es una elección fácil, que ser cristiano significa incorporar a Cristo para ser sus testigos y puede significar llegando al final, el martirio". "El martirio no es una ideología o un propósito como algunos creen, sino una elección y un compromiso. El martirio es una realidad cotidiana".
En un país aparte desgarrados por la violencia y sectarismos, étnicos y políticos enfrentamientos, Mar Sako dijo que el martirio es la "expresión absoluta de amor por Jesús, como se vio en octubre de 2010 con fr. Wassim en la Catedral Católica Siria en Bagdad cuando clamó a los terroristas "mátenme, pero liberen a los fieles". Él sabía lo que estaba diciendo: era su compromiso como pastor y como amante de Cristo y de sus propios feligreses."
El testimonio de cristianos iraquíes puede ayudar a los fieles de todo el mundo "para encontrar un significado en la vida," explica el patriarca caldeo, según el cual las oraciones y celebraciones "son momentos fuertes y privilegiadas de celebración, esperanza y alegría". Al mismo tiempo, la amistad y la solidaridad del oeste son una fuente de valor para "resistir y estancia" por último, Mar Sako renovó su llamado a los cristianos en el Medio Oriente a "continuar su testimonio", mirando el sufrimiento como "un verdadero signo de esperanza y paz" y pidió a los laicos a estar "más involucrados y activos en el desarrollo cultural, social y político de sus países y no tener miedo a reclamar sus derechos civiles y la igualdad de los ciudadanos"