Islamabad (AsiaNews/Agencias)- Poniendo fin en modo improviso al cese del fuego entre Islamabad y los talibanes, las fuerzas de la aviación paquistaní lanzó una serie de ataques en el distrito tribal de Khyber, en la frontera con Afganistán, en el nord-oeste del País. Fuentes militares refieren que el balance de las operaciones, que continuaron a lo largo de toda la jornada de ayer, es de 37 combatientes islámicos muertos y al menos 18 heridos. Por el momento no son posibles verificaciones independientes sobre el número y la identidad de las víctimas, porque a los periodistas no les es permitido acceder a la zona. Los ataques aéreos de ayer son la primera operación militar contra el Tehrik-e-Taliban Pakistan (Tpt), desde la declaración de cese de fuego de inicios de marzo.
Analistas y expertos de política interna subrayan que esta prueba de fuerza del ejército representa un duro golpe a los esfuerzos- por otro lado inciertos- de paz promovidos por el primer Ministro Nawaz Sharif. Un alto oficial del ejército, detrás de anonimato, refiere que el objetivo del ataque era una célula militante, responsable del ataque a Peshawar el 21 de abril pasado, que causó la muerte de 5 policías. Se trataría del mismo grupo responsable del atentado del 9 de abril en el mercado orto-fructícolo de la ciudad, en el cual murieron 22 personas.
Los talibanes ya han anunciado retorsiones como respuesta al ataque aéreo: "No apenas serán confirmadas estas muertes- anuncia un portavoz- ciertamente nos vengaremos". Sin embargo, por el momento no parecen intencionados a hacer nada y cerrar las puertas en la car al diálogo inicisdo en los meses pasados con el ejecutivo. El 22 de abril los dos frentes se encontraron en Islamabad, y programaron una serie de coloquios y un nuevo período de tregua para evitar ulteriores atentados.
En enero el gobierno puso las bases para el inicio de un diálogo de paz con los talibanes, que continuó con la presentación en las semanas sucesivas del primer Código de conducta en materia de Seguridad nacional. Iniciativas que aún no han parado el espiral de violencias, de marca extremista islámica, que desde hace tiempo ensangrienta al País. Si bien, por un lado, el Ttp prometió respetar el cese del fuego, por el otro los milicianos talibanes han atacado en repetidas ocasiones a instituciones, cuarteles de la policía, objetivos militares. Como respuesta, el ejército realizó una serie de ataques en las zonas tribales contra bastiones islamistas. La tregua entre el gobierno y los talibanes caducó el 16 de abril pasado, pero los islamistas confirmaron el propósito que continuarán las tratativas. Por otro lado, en el contexto de los coloquios los talibanes piden la liberación de centenares de prisioneros, el retiro del ejército de muchas zonas tribales cerca de la frontera con Afganistán y la introducción de la ley islámica (sharía) en el País.
Con más de 180 millones de habitantes (de los cuales el 97% profesa el islam), Paquistán es la sexta nación más poblada en el mundo entre los Países musulmanes después de Indonesia. Cerca del 80% es suní, mientras que los shiítas son el 20% del total. Existen además hindúes (1,85%), cristianos (1,6%) y sikh (0,04%). Según una reciente estadística, desde el inicio de la campaña de violencias de los talibanes paquistaníes en 2007 fueron asesinados más de 6,800 personas en atentados, explosiones y homicidios elegidos en todo el País.