Arzobispo de Singapur: También los homosexuales llamados a la castidad, como todos los fieles
En una carta pastoral, mons. Goh explica que la atracción entre personas del mismo sexo. "no es en sí un pecado", la Iglesia "no contempla relaciones" que tengan una connotación "sexual". Entonces, la tarea de los católicos es "afirmar la verdad" de las Escrituras, pero no existe la "condena" del pecador. El juicio corresponde "sólo a Dios".

Singapur (AsiaNews)- La atracción entre personas del mismo sexo: "no de por sí un pecado", pero dado que el amor "a menudo trata de expresarse a nivel físico", el desafío "a la castidad y a la fidelidad al plan de Dios está siempre presente". Por otro lado la Iglesia católica "no desaprueba" una relación afectiva entre personas del mismo sexo pero que "sea casta y fiel", pero al mismo tiempo no contempla "una relación sexual entre personas del mismo sexo". Es cuánto subraya en una larga carta pastoral el arzobispo de Singapur, mons. William Goh Seng Chye, retomando el debate que está en primera fila en estas últimas semanas en la ciudad-Estado, centralizado en la familia, las discriminaciones de género y las uniones homosexuales. El prelado subraya su propio disgusto por las reacciones de algunos fieles, que han manifestado "dolor, ira y desilusión" y niega mientras tanto una actitud de "ostracismo de la Iglesia, como surgiría en el resto de la sociedad", hacia los homosexuales cuyo "amor" no sería "aprobado".

El tema de la homosexualidad es candente en la ciudad-Estado y en los días pasados, se tuvieron dos diversas manifestaciones en contraposición entre ellas. Por una parte la sexta edición de la "Pink Dot", una especie de Gay Pride en salsa local que ha convocado a miles de personas. En respuesta al orgullo homosexual, el líder musulmán Ustaz Noor Deros promovió el movimiento "Vestidos de blanco", invitando a todos los fieles islámicos a boicotear la manifestación "en rosa". A la iniciativa han adherido también miembros de la comunidad protestante local, entre ellos los bautistas y las iglesias pertenecientes a la red LoveSingapore.

El arzobispo de Singapur, intervienen de nuevo sobre el argumento, dirigiéndose a cuántos entre los fieles tiene inclinaciones hacia personas del mismo sexo y subrayando que no es "indiferente en relación a vuestro dolor y frustración". "Veo diversos católicos con orientación hacia el mismo sexo-agrega- en búsqueda de un apoyo espiritual, consejo y cura". Y tantos que "se esfuerzan en vivir la propia vida con amor, fidelidad y castidad". En este contexto el prelado pide a las enseñanzas de la Iglesia, que salvo en la relación conyugal invita "a la castidad", si hacer distinciones "sobre la orientación sexual" y un discurso análogo vale también para "el divorcio".

Lo que les digo, subraya mons. Goh, es parte del "Magisterio de la Iglesia" en lo que se refiere a temas como la contracepción, las relaciones sexuales, el aborto, etc; la moral católica, agrega, está fundada sobre "la razón humana, iluminada por la fe". Él se refiere a diversos pasajes de las Sagradas Escrituras, en los cuales "no están permitidas "las relaciones sexuales entre personas del mismo sexo, aunque si muchos son propensos a creer "en modo sincero y genuino" que esto sea permitido. Existen también problemas e implicaciones familiares que derivarían de uniones homosexuales, en tema de matrimonio y de adopción. El arzobispo de Singapur, explica que "la falta de uno de los padres de sexo distinto", sería una fuente "de riesgo" para el niño y causa de "crisis de identidad", además que de un daño "para la sociedad y el futuro".

"Contra las tendencias dominantes en el mundo-afirma el prelado- la Iglesia tiene el deber de reafirmar la verdad, así como esta está revelada en las Escrituras. Y esto vale también para las enseñanzas de la moral, que pueden parecer difíciles de aceptar como aborto, eutanasia, células estaminales y así adelante". Mons. Goh, agrega también que la Iglesia "condena a los pecadores, pero pone el acento sobre el pecado" y el juicio "está reservado a Dios". Todos los bautizados "están llamados a la castidad", concluye el arzobispo-y dado que es "difícil" permanecer castos hoy, todos los católicos "necesitan de la ayuda de Dios y el apoyo de la comunidad cristiana".