Párroco de Trípoli: Llévense a casa los trabajadores filipinos, quienes están arriesgando sus vidas aquí
La comunidad, cerca de 13 mil personas, está en la mira de los extremistas islámicos. El párroco de la iglesia de María Inmaculada: "se debe considerar a los refugiados de la guerra, necesitamos un barco para conseguir que se vayan". Dos congregaciones religiosas reclaman en Italia las monjas presentes en la zona: "Demasiado arriesgado para estar aquí."

Trípoli (AsiaNews / CBCP) - La Iglesia católica en Libia "está haciendo todo lo posible" para ayudar a los trabajadores filipinos en el país para volver a casa sanos y salvos. Lo dice el párroco de la iglesia dedicada a María Inmaculada en Trípoli, p. Amado Baranquel, que pide al gobierno de Manila a "considerar una repatriación por vía marítima. Actualmente, los enfrentamientos entre el ejército regular y los islamistas hacen impensable una transferencia por tierra."

La comunidad filipina en Libia tiene cerca de 13 mil miembros: a pesar de ser en general bien recibida, el avance de los extremistas islámicos también los ha afectado. Un hombre de 50 años, un trabajador de una empresa de construcción, fue secuestrado y decapitado en Benghazi el 23 de julio porque "no era musulmán". Además, explica el padre. Baranquel, "la violencia y las violaciones contra los extranjeros están en el orden del día". Dos órdenes religiosas, confirma el párroco, han reclamado en Italia a sus monjas presentes en el país: "Demasiado arriesgado para ellas permanecer aquí".

El sacerdote añade: "Los filipinos se han de considerar refugiados de guerra, y Manila debe preparar un barco para llevarlos a casa. Actualmente es imposible viajar por tierra: La milicia y los islamistas de al-Qaeda están luchando por la supremacía, es demasiado peligroso moverse. Hago un llamamiento a todos los fieles: continúen orando por la salvación de estos trabajadores".