La excomunión de Pyongyang: China es un País decadente y sin más principios.
El régimen de los Kim, desilusionado por la elección de Xi Jinping de visitar antes a Corea del Sur. Una fuente en la frontera: "Si las cosas van mal, tanto mejor para nosotros. El gobierno no vende a China y por lo tanto roba nuestros recursos naturales. El pueblo no se ha beneficiado en estas relaciones".

Seúl (Asianews)- China "es un País sin principios, burgués y decadente". La condena apareció en el Rodong Sinmun, órgano de prensa oficial del gobierno nord-coreano, y representa el último paso en el enfriamiento de las relaciones entre Beijing y pyonyang. La crítica, dentro de un editorial de amplio rayo sobre "el estado del mundo", refleja la realidad de una desilusión del régimen por la decisión de Xi Jinping de ir en vista de estado antes a Seúl que a Pyongyang. La decisión del líder chino representa una cosa inédita en la historia de las relaciones bilaterales, dado que desde tiempos de Kim Il-sung, China era considerada como el mayor aliado y comprador comercial del último Estado estalinista del mundo.

El enfriamiento de las relaciones- y la cercanía de Corea del Norte a Rusia, que recientemente canceló una deuda que contrajo con Pyongyang de 10 billones de dólares- no preocupan más de lo debido a la población común. Según algunas fuentes, citadas en el New Focus, que comercian en le frontera chino-coreana, "los ciudadanos no se beneficiaron en nada en las relaciones oficiales entre los dos Países. Dinero y artículos de primera necesidad provenientes de China siempre terminaron en manos de los soldados y del Partido, no seguramente en manos de la gente".

Es más, continúa la fuente, "pienso que la situación general mejore cuando el comercio oficial se detiene, porque nuestro recursos naturales no vienen robados por las agencias del gobierno. Esto significa ganancias menores y coimas más livianas para los funcionarios, pero quiere decir también que los canales ilegales están más abastecidos. Yo mismo ayer entregué 50 kg de yerbas medicinales a un contacto mío en China".

En lo que se refiere al futuro de las relaciones bilaterales, la fuente no tiene dudas: "Casi todos hablan del empeoramiento de nuestros ligámenes con los chinos, y aquellos con más coraje llegan a hablar meneando la cabeza. Algunos expresan hasta escepticismo: ¿Qué puede hacer un muchachito como Kim Jong-un [el actual dictador nord-coreano, ndr] en relación con nuestras relaciones internacionales?".