Papa: "No podemos resignarnos a pensar en el Oriente Medio sin cristianos"
"Muchos de nuestros hermanos y hermanas están siendo perseguidos y tuvieron que abandonar sus hogares de una manera brutal" ante "la indiferencia de muchos". El cardenal Pietro Parolin: se requiere una respuesta de la comunidad internacional al terrorismo del Estado Islámico y sirva a una negociación que de solución a todos los problemas en el Medio Oriente a partir del conflicto palestino-israelí.

Ciudad del Vaticano (AsiaNews) - En el Medio Oriente hay un terrorismo de "dimensiones inimaginables" y muchos cristianos están siendo perseguidos "ante la indiferencia de muchos .Esta injusta situación requiere, además de nuestra oración constante, una respuesta adecuada también de parte de la comunidad internacional". El Papa Francesco abrió con estas consideraciones, la parte del Consistorio de hoy dedicada a la situación de los cristianos en Oriente Medio, que también involucra a los patriarcas de la región.

La reflexión sobre el Medio Oriente fue seguida a la primera parte del consistorio ordinario público para la canonización del Beato Giuseppe Vaz  (sacerdote del Oratorio de San Felipe Neri, fundador del Oratorio de la Santa Cruz Milagrosa en Goa y apóstol de Sri Lanka y la India) y María Cristina de la Inmaculada Concepción (fundadora de la Congregación de las Hermanas víctimas expiatorias del Santísimo Sacramento).

"Compartimos - dijo el Papa -.Nos une el deseo de paz y de estabilidad en Oriente Medio y la voluntad de favorecer la resolución de los conflictos a través de diálogo, la reconciliación y el empeño político. Al mismo tiempo, deseamos brindar la mayor ayuda posible a las comunidades cristianas para sostener su permanencia en la región. Como he tenido la ocasión de reafirmar varias veces, no podemos resignarnos a pensar en Oriente Medio sin los cristianos, que desde hace dos mil años confiesan el nombre de Jesús. Los últimos acontecimientos, sobre todo en Iraq y en Siria, son muy preocupantes. Asistimos a un fenómeno de terrorismo de dimensiones antes inimaginables. Tantos hermanos nuestros son perseguidos y han tenido que dejar sus casas, incluso de manera brutal. Parece que se ha perdido la conciencia del valore de la vida humana, parece que la persona no cuente y se la pueda sacrificar por otros intereses Y todo esto, lamentablemente, ante la indiferencia de tantos.

"Esta situación injusta requiere, además de nuestra constante oración, una respuesta adecuada también de parte de la Comunidad Internacional. Estoy seguro de que, con la ayuda del Señor, del encuentro de hoy brotarán reflexiones y sugerencias válidas para poder ayudar a nuestros hermanos que sufren y también para salir al encuentro del drama de la reducción de la presencia cristiana en la tierra donde ha nacido y desde la cual se ha difundido el cristianismo".