Vijayawada (AsiaNews) - "Para Santa Teresa de Ávila, la monja carmelita es
una mujer que vive en soledad por los demás. La pared detrás de la que vive no
es un signo de separación, sino de compromiso. Ella es una mujer de la Iglesia y su vida está
centrada en la Eucaristía,
donde recibe a Cristo y se ofrece en unión con él, para la Iglesia". Así la
hermana Gloria ocd, priora de la comunidad de monjas carmelitas en Vijayawada,
Andhra Pradesh, se refirió a la asamblea convocada para celebrar los 25 años a
partir de los votos de Sor María Alfonsa, su hermana.
Celebrado el 16 de febrero pasado, el aniversario fue embellecida con dos coincidencias:
2015 es el año de la vida consagrada, en la que va a caer incluso el 500
aniversario del nacimiento de Santa Teresa de Ávila, reformadora de la orden
carmelita.
El aniversario de la
Hermana María Alfonsa fue celebrado con una procesión, que
culminó con una celebración eucarística de acción de gracias celebrada por
Mons. Govindu Joji, administrador apostólico. Muchos sacerdotes, hermanas y
familiares de la religiosa - procedente de Kerala - asistieron a la misa.
En su introducción, la priora agradeció a la reunión y explicó el sentido de
ser parte de una comunidad de clausura totalmente consagrados a Jesucristo.
"Su amor - dijo la hermana Gloria - nos reunido como hermanas para orar
por las necesidades de la
Iglesia y del mundo".
Condujo la homilía el p. Johnson, provincial de los Carmelitas en Andhra
Pradesh. Después de haber esbozado una breve historia de las vocaciones
contemplativas en la Iglesia,
explicó: "Dejar ir cada cosa es el centro del alma de una orden de
clausura. Por esto sólo cuando uno se entera de la grandeza de Dios deja ir
todos los otros símbolos y estará en comunión con Jesús, experimentando el amor
en su plenitud".
* Misionera de la Inmaculada, Congregación femenina
asociada al Pontificio Instituto de Misiones Extranjeras (PIME).