Beirut (AsiaNews) - El Consejo de Seguridad de la ONU ha pedido el acceso humanitario al campamento de refugiados palestinos de Yarmouk, en las afueras de Damasco. Durante días, al menos desde el 1 de abril, el Estado islámico (EI) ha ocupado parte del campo, que se ha convertido en un teatro de la guerra contra el ejército sirio. En ayuda a los militantes del Estado islámico, también ha intervenido el frente al-Nusra frontal, vinculado a Al Qaeda, que Occidente a menudo define como una "oposición siria moderada". Al mismo tiempo, los militantes palestinos opuestos a Damasco y combatientes del Free Syrian Army luchan contra el EI.
El Consejo de Seguridad, presidido por el Embajador de Jordania Dina Kawar, solicitó el acceso humanitario para "proteger a los civiles ... y [dar] el apoyo para salvar vidas". Un enviado de la ONU ha descrito como "más que inhumana" la situación de los 18.000 refugiados del campamento.
El campamento de Yarmouk está a ocho kilómetros de la capital y la ocupación de parte del EI es una premisa para atacar a Damasco. Al mismo tiempo, los refugiados son utilizados en la práctica como escudos humanos contra los ataques aéreos o de los helicópteros del ejército sirio.
Según varios estudiosos, este ataque en Yarmouk manifiesta un desprecio absoluto de las luchas del fundamentalista islámico hacia el irredentismo palestino.
El Prof. Samir Saúl, profesor de historia de las relaciones internacionales en la Universidad de Montreal, dijo que "a los palestinos no se les escapa que los jihadistas no luchan contra Israel; algunos, entonces, en particular, al-Nusra, reciben asistencia de Israel "(cfr. Orient-Le Jour hoy).
En el pasado, el campamento de Yarmouk fue un aliado de Siria. En el año 2012, dirigido por Khaled Meshaal, líder de Hamas en el exilio, el campo se ha convertido en el enemigo de Assad (mientras Meshaal se hizo amigo de Qatar). La ironía de la historia, es que hoy el ejército sirio defiende a los palestinos que siguen presentes en el campo