Los líderes musulmanes libaneses contra los ataques anti-cristianos y la violencia en nombre del Islam
de Fady Noun
En Beirut, la primera reunión de las más altas autoridades musulmanas en la elección local del nuevo Mufti. En una declaración conjunta, denunciaron las amenazas a la unidad, la seguridad y la estabilidad del mundo árabe. Las denuncias a un plan (israelí) que pretende dividir los musulmanes. Defiende los cristianos y otras minorías en el Medio Oriente.

Beirut (AsiaNews) - Condena de la discriminación y violencia del Islam takfirista, clara oposición a cualquier tipo de coacción en materia religiosa, el respeto a los derechos privados y públicos de cada uno, la afirmación del pluralismo, tanto en las relaciones entre musulmanes y cristianos, como en las relaciones al interior del Islam. Estos son algunos de los puntos tratados en el comunicado final de la cumbre extraordinaria islámica (en la foto), que se celebró ayer en Beirut en el Dar al-Fatwa, la sede oficial del Gran Muftí de Líbano, el más alto cargo del país musulmán sunita.

Viene a coincidir con la visita del cardenal Dominique Mamberti en el Líbano la cumbre, la primera elección del nuevo Mufti de la República, se unió a las cuatro personalidades más importantes del mundo musulmán locales: Abdel Latif Deriane de Dar al-Fatwa, el vicepresidente Presidente del Consejo Supremo Islámico (chiita) Abdel Amir Kabalan, líder Naïm Hassan Akl druso y jefe de la comunidad alauita de Assad Líbano Assi. Para coordinar el trabajo estab Mohammad Sammak, co-presidente de la Comisión Nacional para el diálogo islámico-cristiano.

Cubierto con un sentido de urgencia debido a los muchos problemas que plantea la actualidad, el trabajo de la cumbre se centró en la "alarmante situación en el Líbano y el mundo árabe, y sus consecuencias en las relaciones entre los musulmanes y las relaciones entre cristianos y musulmanes".

En la declaración final, los líderes religiosos expresaron su "preocupación extrema acerca de los trastornos que involucran muchos países árabes, que tienen el carácter de un confesionario, sectaria y racista". Desarrollos similares, según el informe, son "un peligro para la unidad de estos países, entre ellos Líbano, y por lo tanto también para su seguridad y su estabilidad".

Un proyecto israelí

"Estos temas – añade el texto - son el resultado de un plan del enemigo israelí, cuyo objetivo es dividir las filas de los musulmanes y para destripar el tejido nacional que mantiene unidas las distintas almas de las sociedades árabes". Los últimos acontecimientos "parecen indicar que los musulmanes en general y los árabes, en particular, han renunciado a dar prioridad a la causa palestina, y que este [...] entre en el ámbito de los proyectos sobre la base de la confesión y la división sectaria."

Ocho sugerencias

A pesar de los problemas, la cumbre ha publicado ocho sugerencias que figuran a continuación:

1 - Invitar a los musulmanes de no hacer diferencias entre ellos, que no significa la ausencia total de desacuerdo, sino más bien la aceptación de la diversidad y el respeto por los demás, basado en la regla de fe que quiere que "los creyentes sean hermanos" entre ellos. La diversidad de las escuelas de pensamiento e interpretaciones no quita o debilita esta hermandad, que es el fruto de la fe en Dios, su Profeta y el Corán".

2 - Afirmar que "la muerte de un musulmán a manos de otro musulmán se castiga con una norma religiosa contenida en el Corán".

3 - Condenar todas las formas de extremismo y de los juicios de la apostasía (takfirismo) emitidos con respecto a otros creyentes en el único Dios, una práctica que también es una bofetada a la tolerancia que caracteriza al Islam [...], falseando y distorsionando la imagen.

4 - El camino correcto a seguir en las relaciones entre los musulmanes y el diálogo entre musulmanes y cristianos está hecho de justicia, moderación, de respeto a la diversidad y las diferencias entre los hombres.

La condena del terrorismo y el extremismo

5 - Para condenar las conductas terroristas que van de la mano con el extremismo, y contra la que nos advirtió el Profeta [Muhammad]. Estas conductas son contrarias a la sharia islámica y los principios que afirman la dignidad del hombre y la salvación de todas las almas.

6 - Invitar a líderes musulmanes de todas las facciones en el Líbano y los Emiratos y el mundo islámico para reconstruir los cimientos de la fe y de la doctrina musulmana, evitando encontrarse con malas interpretaciones que hacen decir al Islam lo que realmente no quiere decir. Evitar caer en la trampa de la discordia tensa del enemigo israelí y que las fuerzas que lo apoyan están tratando de revivir. La religión musulmana es una, aunque sus voces (sharia) son plurales. Sólo Dios es el juez de las diferencias entre los hombres.

Cristianos orientales

7 - En el nombre de los principios religiosos, humanitarios y nacionales la cumbre condena la agresión de la que son víctimas, por motivos sectarios, los cristianos de Oriente y la destrucción de sus hogares, sus pueblos, sus propiedades e incluso lugares de culto, cuando el profeta ha ordenado que sean respetados, protegidos y defendidos. Estos ataques, así como aquellos de los que fueron víctimas otros musulmanes y no musulmanes de otras religiones y culturas, como los Yazidi, son comparables a las agresiones contra el propio Islam.

8 - La cumbre reafirma su profunda convicción en el respeto a la dignidad humana, las libertades individuales y públicas, la libertad religiosa en particular, y rechaza cualquier forma de coacción en materia religiosa o hecho en nombre de la religión.

El cumplimiento de la Constitución del Líbano

En conclusión, la cumbre reiteró "su profunda confianza en la existencia de estados nacionales que garanticen la igualdad de todos los derechos y deberes, y pide a los libaneses respetar las instituciones del país, de su constitución y el código, en defender la paz civil mediante el reconocimiento de la diversidad dentro de un solo Estado". También ha "advertido contra las convocatorias de la discordia y reafirmó la hermandad entre los musulmanes de diferentes escuelas de pensamiento, así como la capacidad del Líbano para ajustar sabiamente su crisis interna [...]. Y finalmente renueva la esperanza de ver el Líbano capaz de elegir a un nuevo presidente - el único presidente cristiano en el mundo árabe - y para elevarse a la categoría de modelo en la resolución de la crisis que aflige a muchos países árabes hermanos.