Paquistán, Justica y paz: “alegría y gratitud” por la encíclica “verde” del Papa Francisco
de Shafique Khokhar
Mons. Joseph Arshad, presidente de la Comisión episcopal, subraya la defensa de los “derechos de los pobres y de las personas más necesitadas del mundo”. La comunidad católica de Paquistán acoge con el “corazón abierto” el documento y sus “reflexiones articuladas” en tema de “ecología y pobreza”. Plegaria por el ambiente y conversión de los estilos de vida.

Faisalabad (AsiaNews)- La Iglesia católica en Paquistán expresa “alegría y gratitud” por la encíclica del Papa Francisco: “Laudato sí”, que relanza la defensa de los “derechos de los pobres y de las personas más necesitadas del mundo”. Es cuánto subraya en una declaración oficial enviada a AsiaNews por mons. Joseph Arshad, presidente de la Comisión nacional de Justicia y Paz de los obispos paquistaníes (Ncjp), comentando la reflexión del pontífice argentino dedicada al ambiente, al creado y a “nuestra casa común”.

“La Iglesia en Paquistán acoge con el corazón abierto la encíclica del Papa Francisco”, dice el prelado, el cual aprecia “los pasos iniciados por el santo padre en defensa de las personas más débiles y perjudicadas”. Las “reflexiones articuladas” del pontífice “sobre la ecología, la justicia y la pobreza-agrega- aumentarán la importancia de la vida de todas las creaturas de Dios”.

Mons. Joseph Arshad continúa recordando el “peligro” que corre hoy nuestro planeta, nuestra “casa común” como la define el Papa, que al interior de la encíclica está demostrado y narra en toda su urgencia y dramaticidad. “El riesgo es común a todos nosotros- advierte el prelado- sin  distinción de etnia, geografía, confesión religiosa e identidad cultural”.

Por esto es por otro lado importante tomar todos esos pasos que puedan “impedir” consecuencias catastróficas” frente a una situación cargada de peligros y dramaticidad. La encíclica del Papa “es una llamada a la unidad”, prosigue el presidente de la Ncjp, una “unidad en la oración por el ambiente, a la conversión de los corazones y de los estilos de vida”, para que haya “respeto” por cada ser viviente que puebla el planeta.

Delante a tan graves problemas en tema de ecología y ambiente, escribe aún, mons. Joseph, la Iglesia “se reúne alrededor de las palabras del Papa Francisco” y pone en campo todos los recursos- espirituales y no- para “proteger lo creado, nuestra casa común” Por último, el prelado subraya el “sincronización” en la publicación de la encíclica, en vista de la Conferencia Onu sobre el clima programada para fin de año en París (Francia). “Trabajamos por un acuerdo sobre el clima- concluye- que sea en beneficio de la entera humanidad. Porque nuestra casa común es de todos, y es tarea de todos, ricos, pobres, jóvenes y ancianos, el cuidarla”.