Dalian (AsiaNews/Agencias) – El futuro de la economía china “es rosa, gracias a sus sólidas bases y a su fuerte impulso. Por esta razón no serán necesarios estímulos adicionales de parte del gobierno, y por esto mismo podemos sostener que las previsiones de crecimiento para el 2015 serán respetadas. Las oportunidades que ofrecen nuestros mercados son aún mayores que los riesgos”. Lo declaró esta mañana el prémier Li Keqiang durante el World Economic Forum de Dalian, al nordeste del país.
El primer ministro, a quien, como es tradicional, se le delega la economía, afirmó no ser “ciegamente optimista. Soy optimista porque nuestro país puede contar con un gran potencial y con una tenacidad innata”. Li agregó que su gobierno tomará nuevas iniciativas en los sectores de la nueva industrialización, la tecnología informática, la urbanización y la modernización de la agricultura. La reformas emprendidas para crear un crecimiento económico sustentable, prosiguió, “han tenido éxito”.
El número dos de la política china no se hizo mayormente cargo del colapso de la Bolsa de Shangai, que ha constelado el mes de agosto de 2015, pero prometió que no habrá otras devaluaciones del yuan. La moneda nacional, cuya caída fue provocada por el Banco Central del Pueblo, podría desencadenar una guerra de monedas, al menos, entre las naciones asiáticas.
Todo esto no ocurrirá, según el prémier, porque China “tiene vastas reservas financieras y la capacidad de ahorro de las familias es de muy alto nivel: las reformas que serán promovidas en los próximos meses permitirán un uso apropiado de estos recursos”. Li agregó que, no obstante, es necesaria una reforma del sistema financiero que tenga presente “la importancia de las fuerzas del mercado, al promover un mercado de capitales justo, transparente y estable”.