Damasco (AsiaNews) – Abrir una coalición empeñada en la guerra contra los movimientos islámicos y yihadistas en Siria (e Irak), con la posible entrada en un futuro próximo de Rusia e Irán. Mientras que Putin y Obama discuten, el presidente iraní, Hassan Rouhani invoca la formación de un "frente unido" contra el terrorismo en el Medio Oriente y confirma que Teherán está dispuesto a "llevar la democracia" a Siria y Yemen.
Una fuente diplomática de AsiaNews en Damasco, habla de "situación delicada y compleja" en un escenario internacional en evolución y es, por tanto, difícil hacer predicciones. "Es el interés de todos - añade - detener la guerra y la violencia, incluso resolver la crisis de refugiados en Europa. Sin embargo, cuando se entra en las formas concretas para lograr las metas las diferencias surgen más ampliamente". Más allá de una "voluntad común" general, dijo la fuente, permanecen las "discusiones" hasta ahora infructuosas sobre "soluciones a desplegarse. Mientras tanto, la realidad sigue siendo crítica, con civiles cada vez más agotados por años de conflicto".
De hecho, los Estados Unidos y Francia - que lanzó ayer los primeros ataques aéreos en Siria - insisten en que Assad debe salir después de un período de transición y el proceso de reconstrucción del país debe hacer sin el actual presidente. Para los dirigentes rusos esta solución sería un "gran error", porque el gobierno de Damasco, hasta la fecha, es un socio clave en la lucha contra el Estado islámico.
De la crisis de Siria en la Asamblea General de la ONU también habló el presidente iraní Rouhani, quien pidió la creación de un frente común para combatir el extremismo. Hablando por primera vez después de la histórica firma del acuerdo sobre la energía nuclear, el líder iraní emitió una invitación "a todo el mundo y en particular a los países de mi región, para discutir un plan de acción y crear un frente unido contra el extremismo y la violencia". La mayor amenaza para el mundo hoy, agregó, es la transformación de "organizaciones terroristas en naciones terroristas". En la crisis de Siria, él no ha querido indicar lo que será el futuro destino de Assad, pero sugirió que sea el mismo pueblo a través de elecciones quien elija la guía futura. "Apoyamos - dijo - la consolidación del poder por el voto popular, más que por la fuerza de las armas".