Macao (AsiaNews)- Con la catedral repleta de cristianos se concluyó la ceremonia de la apertura de la Puerta Santa de la Misericordia en Macao, en China meridional. La celebración litúrgica se desarrolló a las veinte de ayer por la noche, para permitir a todos los cristianos que pudiesen participar.
La liturgia inició con la procesión del obispo de la diócesis Mons. José Lai y unos treinta sacerdotes que hicieron el recorrido hasta la Puerta Santa de la catedral, dedicada a María Naciente. Después del saludo del obispo y la proclamación de la parábola evangélica de la oveja perdida en cantonés, portugués e inglés, se dio lectura a la Bula del Jubileo extraordinario de la misericordia.
Inmediatamente después el obispo invitó a todos los fieles a pasar a través de la Puerta Santa, guiando el cortejo a través de la puerta decorada. Muchos fieles tuvieron que permanecer fuera de la iglesia por la cantidad de fieles.
Después de la renovación de las promesas bautismales siguió la homilía del obispo. Mons. Lai invitó a los participantes a sumergirse en este año de gracia y misericordia de dios hacia la humanidad, para ser instrumentos de misericordia para los otros. También aconsejó acercarse al sacramento de la confesión para experimentar la misericordia de dios en la ´propia carne. Y concluyó exhortando a los fieles a compartir esta experiencia con los no creyentes, viviendo el espíritu misionero en el Año de la Misericordia y pidiendo a todos de rezar por el mundo, necesitado de misericordia a causa de tantos conflictos.
La liturgia se concluyó con la bendición con el agua, el Te Deum en latín y el canto de la Salve Regina.
Entre los fieles había una alegría palpable por el deseo de caminar con la Iglesia universal, siguiendo el recorrido marcado por el Papa Francisco, para el Año de la Misericordia y se desarrollará en todas las parroquias, representadas ya pos sus estandartes en esta ceremonia de inicio del Año Santo en el centro histórico de Macao.