El Pastor Sebastián Marín fue detenido junto con dos compañeros de trabajo del centro de oración que dirige. Los tres están acusados de violar la Anti-Superstition and Black Magic Act, una ley contra la brujería. Sajan K. George: "Jesús es el sanador. La oración y la imposición de las manos tienen nada de mágico".
Mumbai (Agencia Fides) - El pastor pentecostal Sebastián Marín fue detenido por la policía en Vasai, Maharashtra, en el oeste, bajo la acusación de practicar la brujería. El religioso es el fundador del centro de oración Ashirwad, y se le detuvo junto al director Vishnu Kudve y a Vaibhav Tare, miembro del personal. Sajan K. George, presidente del Consejo Global de Cristianos Indios (Gcis), denunció a AsiaNews la detención: "Todo esto es sospechoso. Los pentecostales creen que la medicina y la fe son compatibles, ambos son parte del ministerio terrenal de Jesucristo".
La detención se produjo el 31 de enero, pero se hizo público sólo en estos días. A raíz de una lesión en la espalda, el pastor es admitido en el Hospital Júpiter en Thane, en régimen de detención preventiva, bajo la supervisión de la policía.
Los tres cristianos fueron detenidos tras la denuncia de Maharashtra Andhashraddha Nirmoolan Samiti (Mans), una organización dedicada a "erradicar la superstición" en la India. Según la denuncia, los tres hombres son detenidos bajo la Anti-Superstition and Black Magic Act [una ley estatal Maharathi promulgada después del asesinato del fundador de la Mans - ndr].
Contactado por AsiaNews, el centro de la oración se niega a dar declaraciones. En su página web dice lo siguiente: "Nuestro ministerio de sanidad se lleva a cabo en los suburbios Vasai, periferia de Mumbai. El 99% de la congregación se compone de pobres y no cristianos, que vienen aquí, y que pueden cambiar sus vidas y sanar gracias al mensaje salvador del Señor".
El presidente del GCIC dijo que "los cristianos pentecostales no ven ninguna contradicción en prescribir una medicina, al mismo tiempo, en confiar en Dios para una curación divina. La gente va en este centro, así como a otros regentados por los pentecostales, a rezar con la esperanza de recibir la curación física". "Jesús es el sanador - concluye - y no hay nada mágico sobre en el orar o la imposición de manos. La detención de los tres cristianos es injusta y tiene como único propósito intimidar a la comunidad". (NC)