Pakistán: cristianos y musulmanes divididos sobre los “sermones de Estado”
de Kamran Chaudhry

La Asamblea provincial de Sindh quiere introducir una ley para controlar las predicaciones de los ulemas. Los sermones serán difundidos sólo si son aprobados antes por el gobierno. Todos los partidos islámicos se oponen. La Iglesia católica subraya los pro y los contras. “La nueva ley pondrá un freno al sectarismo”, pero “en el futuro podrían incluso pedir grabar las homilías”.


Lahore (AsiaNews)- La Iglesia católica de Pakistán recibió con sentimientos contrastantes la propuesta de ley presentada en la provincia de Sindh, según la cual los sermones de la plegaria islámica del viernes estarán sometidos a un estrecho control por parte del Estado. El padre Abid Habid de la Asociación de Superiores mayores y miembro de la Comisión Justicia y Paz, declara a AsiaNews: “Es necesario que los líderes religiosos pongan más atención en lo que predican durante los fogosos sermones del viernes, pero la nueva ley no me convence del todo. En el futuro, el gobierno podría pedirnos que grabemos las homilías en las comisarías de la policía. Lo único que necesitamos es que los imanes de todas las mezquitas del país sean educados”.

Si, por una parte, la Iglesia católica es escéptica, los musulmanes de Pakistán rechazaron de lleno la propuesta de ley. Los partidos islámicos condenaron la decisión de la Asamblea provincial de Sindh de presentar el proyecto del Juma Khutba (Sermón del viernes), que permitirá la predicación sólo si, preventivamente, el texto es aprobado previamente por el gobierno.

Al pesentar la normativa, Abdul Qayum Soomro, consejero del jefe de ministros de Sindh para los asuntos religiosos, dijo: “Ningún Khateeb (predicador) tendrá el permiso de hacer discursos provocadores. Esta propuesta es importante para aplacar el odio y sustituirlo por la armonía religiosa”.

La nueva norma será aplicada sólo en la provincia, una de las tres que componen el país. Aquellos que critican las formas de militancia en nombre de la religión a menudo han citado las oraciones del viernes como ocasiones para reunir a extremistas exaltados. La Jumu´ah, la oración en común del viernes, está a veces vinculada a las olas de tensión existentes entre cristianos y musulmanes. Por ejemplo, en la provincia de Punjab, diversos incidentes contra los cristianos son atribuidos como consecuencia de los encuentros de los viernes.

Muhamad Asim Makhdoom, secretario para la información del Jamiat Ulema-e-Islam, partido religioso islámico, considera que “la nueva ley difundirá la anarquía”. El Corán- comenta a AsiaNews- “invoca la paz. Pero parece que el gobierno quiera forzar la aprobación de la norma. Ésta pone en discusión al islam y por lo tanto debe ser evitada. Los ulemas no estarán jamás de acuerdo”.

También, mons. Samson Shukardin, obispo de Hyderabad, evidencia los lados positivos de la ley. El prelado concluye: “Esta ayudará a aliviar la tensión que reina en el país, pero debe ser la misma en todas las provincias. El control del gobierno impedirá a los religiosos hablar el uno contra el otro y pondrá un freno al sectarismo”.