El Estado islámico ataca la aldea cristiana de Teleskuf, en la Llanura del Nínive

Fueron atacados algunos cristianos que custodiaban la aldea; los heridos fueron socorridos en los hospitales de la zona. Los habitantes habían huido en agosto de 2014, ante el avance de Daesh. Desde hace tiempo la aldea había vuelto a estar bajo el control de los Peshmerga y de los voluntarios cristianos. Temores del Patriarcado caldeo ante una posible escalada de ataques yihadistas y una nueva ola de evacuados.


Bagdad (AsiaNews) – En las primeras horas de hoy, las milicias del Estado Islámico (EI) perpetraron un duro ataque contra Teleskuf, una aldea cristiana situada en las cercanías de Alqosh, en la Llanura de Nínive, causando graves daños. La zona está ubicada al norte de Mosul, que conforma el bastión iraquí del grupo yihadista que hace dos años controla la región. Según cuanto refiere una nota del Patriarcado caldeo enviada a AsiaNews, en medio del ataque quedaron envueltos algunos cristianos que custodiaban los ingresos a la aldea. Los heridos fueron transportados de inmediato a los hospitales de la zona.

Las comunidades cristianas de la Llanura de Nínive abandonaron sus hogares y sus aldeas entre junio y agosto de 2014, en simultáneo con el ascenso de Daesh [acrónimo árabe para el EI] en la región. En el caso puntual de Teleskuf, los habitantes huyeron en agosto, buscando refugio en Erbil y en otras áreas del Kurdistán iraquí.  Algunos meses más tarde (hacia fines de 2014), los milicianos yihadistas dieron marcha atrás abandonando la zona, que luego terminó en manos de los Peshmerga [los combatientes kurdos], que evitaron su destrucción. Desde hace algún tiempo, el control de la guardia del área es confiado a grupos de cristianos, que quedaron envueltos en el ataque de hoy.

Fuentes del Patriarcado caldeo manifiestan su profunda preocupación a AsiaNews, “por la presencia del Estado islámico en la aldea” y por la destrucción causada. Su temor es que los enfrentamientos y la violencia puedan extenderse a las aldeas vecinas, obligando a los cristianos a huir nuevamente. Para complicar el cuadro, se estima la posibilidad de que “puedan sumarse aún más familias de desplazados” a ”las muchas que ya existen” y que habrán de ser sostenidas y cuyo cuidado habrá que tomar. “Nos encomendamos  a las personas de buena voluntad –concluye la nota del Patriarcado- para que se detengan estos actos de terrorismo”

La situación en Irak, por lo tanto, no parece mejorar, y hoy han sido incluso los cristianos quienes terminaron en la mira de los yihadistas del Califato. Fue justamente ayer que el patriarca caldeo Mar Louis Raphael Sako lanzó una durísima advertencia a la clase política e institucional iraquí, que se ha mostrado incapaz de emprender un programa “compartido” en pos del renacimiento del país. Anteriormente, el auxiliar de Bagdad, Mons.  Shlemon Warduni había afirmado que Irak había llegado a tocar “el momento más bajo” de su historia.