Mohammed Alloush, líder del Alto Comité para las negociaciones (HNC) abandona el cargo. Motivan su decisión el “fracaso” de las negociaciones indirectas de paz ante la ONU y la continua violencia en el territorio. OTras figuras de primera línea de la oposición se disponen a dejar el cargo. En riesgo, las tentativas de paz de las Naciones Unidas.
Damasco (AsiaNews/Agencias) – El jefe negociador de la oposición siria, Mohammed Alloush, presentó su renuncia, a causa del “fracaso” de las negociaciones indirectas de paz ante la ONU, que se desarrollaron en las últimas semanas en Ginebra (Suiza). El líder del Alto Comité para las Negociaciones (HNC), movimiento apoyado por los sauditas, afirmó que las tratativas no han favorecido el logro de un acuerdo político, y que tampoco han mejorado la situación de la población civil de las áreas que están siendo asediadas.
Analistas y expertos explican que la dimisión de Alloush -miembro de Jaish-al-Islam, el Ejército del islam – podría empujar a otros líderes de la oposición a abandonas los coloquios, haciendo fracasar de hecho cualquier proyecto de paz y de transición política.
El mes pasado, el HNC “suspendió” su participación en los coloquios “de proximidad” de las Naciones Unidas, guiados por el enviado especial de la ONU, Staffan de Mistura, imputando a la delegación del gobierno el estancamiento en las tratativas y la escalada de violencia en el campo.
Tal como fue anunciado en los últimos días por el mismo de Mistura, por el momento no hay fecha oficial para reemprender las negociaciones, no obstante en un primer momento se planteaba reiniciarlas a fines de mayo.
En una nota oficial, el líder de la oposición (a la derecha, en la foto) subrayó que “los tres rounds de coloquios no tuvieron éxito” a causa de la “testarudez” del régimen y los “continuos bombardeos y agresiones contra el pueblo sirio. En los últimos meses, los exponentes del frente (no yihadista) anti-Assad, presente en Ginebra, han expresado frustración por la falta de progreso en los coloquios.
Entre los puntos irresueltos, la distribución de ayuda y asistencia en las áreas que están bajo asedio, la lentitud en las operaciones de liberación de los detenidos políticos en las cárceles del gobierno y la ausencia total de pasos rumbo a una transición política que excluya la presencia del presidente Bashar al-Assad.
Actualmente, sigue vigente la frágil tregua alcanzada el 27 de febrero, gracias a la mediación de los Estados Unidos y Rusia, a pesar de las frecuentes violaciones a la misma que se cometen en el terreno.
El conflicto sirio, que estalló en marzo de 2011 como una revuelta civil contra el presidente Bashar al-Assad, ya ha causado unos 280.000 muertos además de una crisis humanitaria sin precedentes, con millones de refugiados.