La joven se llamaba Shwetha D´Souza y tenía veintidós años. La hermana menor alentó a los padres para que “otra persona pueda ver a través de sus ojos”. En India la donación de córnea no está difundida. Cada año, unas ciento cuarenta mil personas necesitarían de un trasplante
Mangalore (AsiaNews)- La familia de Shwetha, una joven católica de veintidós años, decidió donar sus ojos para permitir que otra persona adquiera la vista. Sucedió en Mangalore, en el Estado de Karnataka (parte meridional de la India). La joven murió en un trágico accidente mientras viajaba en bicicleta. Los padres han permitido el trasplante de los órganos tras la súplica de la hija menor, que dijo a la madre: “Por favor, dona los ojos de Shwetha. De este modo ella podrá ver a través de otra persona”.
El 12 de junio Shwetha D´Souza sufrió un accidente en Bangalore, la capital estatal, y falleció en el hospital al día siguiente. Frank y Lethicia, los padres, cuentan a AsiaNews que la decisión de donar los ojos de la muchacha fue inmediata. Quien los alentó fue Kiran, la hija menos de veinte años.
La donación de los ojos no está muy difundida en India, donde reside un tercio de la población mundial con problemas de vista (quince millones de no videntes sobre un total de treinta y nueve). La mayor parte de ellos son tribales pobres y viven en condiciones precarias a causa de la enfermedad. Cada año ciento cuarenta mil personas necesitarían de un trasplante de córnea, pero el número de donantes no supera los cuarenta mil. Esto significa que cien mil enfermos están en lista de espera.
Recientemente un grupo de sesenta hermanas indias se hicieron promotoras de la iniciativa: “The Project Vision”, dirigida a sensibilizar a la población sobre el tema de los enfermos con problemas en la vista. Ellas se propusieron como “embajadoras de la vista” y cuando mueran, donarán sus propias córneas.
Por eso, parece tanto más valiente la elección de los padres de Shwetha. El p. Cyprian Pinto, párroco de la iglesia de san José Obrero de Mangalore, refiere que los D´Souza “son una familia católica llena de fe”. Es realmente una gran gracia que ellos, a pesar del profundo dolor y la aflicción, decidieran donar los ojos de la hija a otro ser humano”.