La categoría representa menos del 2% de la fuerza laboral de China, pero las protestas y huelgas realizadas por ellos toca el 4% del total. Por otra parte, a diferencia de los empleados de empresas privadas, la casi totalidad de los maestros es dependiente del Estado. Sus manifestaciones son a menudo un acto de acusación dirigida a los funcionarios y administradores del gobierno local.
Hong Kong (AsiaNews) - Las imágenes del movimiento de los trabajadores en China tienden a estar dominados por los operarios y, en los últimos tiempos, de los trabajadores del sector del acero y del carbón. Sin embargo, algunas de las protestas mejor organizadas y más decididos de los últimos años se han llevado a cabo por los profesores.
Esta categoría representa menos del 2% de la fuerza laboral de China, pero las protestas y huelgas realizadas por ellos toca el 4% del Mapa de huelgas elaborado cada año por el China Labour Bulletin [CLB, organización sindical independiente con sede en Hong Kong, que vigila el mundo del trabajo en la china continental, ndr]. Por otra parte, a diferencia de los empleados de empresas privadas, la casi totalidad de los maestros es dependiente del Estado. Sus manifestaciones son a menudo un acto de acusación dirigida a los funcionarios y administradores del gobierno local.
Un nuevo informe de CLB titulado "La larga lucha de los maestros chinos por un mejor trabajo" [texto completo aquí] examina los profundos problemas del sistema nacional de educación y los esfuerzos colectivos de los maestros para mejorar los salarios, obtener los retrasos, llenar las diferencias salariales, implementar mejores condiciones de trabajo y superar la falta de seguridad social. El informe pone de relieve las enormes diferencias que existen entre las condiciones de trabajo y salarios de los maestros en las escuelas de élite - los de las grandes ciudades industriales - y los de los distritos rurales pobres.
El gran número de protestas se explica por el hecho de que en China no hay sindicatos reales que pueden dar a estos trabajadores una voz en la gestión de la educación o la formulación de las políticas gubernamentales. Además, no hay mecanismo institucional a través del cual presentar sus reclamaciones. Por ello, los profesores no tienen otro camino que la protesta colectiva cuando se ven amenazados sus intereses.
Los autores del informe presentan algunas recomendaciones para el gobierno chino. Entre otras, proporcionar nuevos fondos a los distritos escolares rurales para que a cada maestro se le garantice un salario mínimo digno; asegurarse de que los estándares de prestaciones y beneficios entre los maestros sean transparentes y disponibles, asegurándose que el desempeño del trabajo no se utilice como una herramienta para reducir el salario mínimo; crear un mecanismo con el que escuchar a los empleados en el campo del salario, las horas de trabajo, beneficios y otros problemas comunes.
Por último, el China Labour Bulletin reafirma la necesidad de permitir una actividad sindical real en el país: "Tenemos que reorganizar las organizaciones representativas de los maestros a través de elecciones democráticas, para que estas estructuras puedan representar seriamente a los trabajadores del sector, tanto en las escuelas individuales como en los distritos escolares".