Contrabando de norcoreanos en la frontera con China

Son empleados como pastores de rebaños y manadas, o como agricultores en la siembra y en la cosecha de la soja. Si bien pagan multas por sus ausencias, logran ganar más que trabajando en Corea del Norte.


Beijing (AsiaNews/Rfa)- Cada año, miles de norcoreanos son transportados desde Corea del Norte a China, para hacerlos trabajar como agricultores. Más que “venta de seres humanos”, se trata de un “alquiler” de mano de obra: los coreanos del norte son transferidos a China al inicio de la primavera y vuelven a su patria a fines del otoño. Ellos son empleados como pastores de rebaños y manadas, o bien en la siembra y en la cosecha de los porotos de soja.

El trabajo de guardián les hace ganar hasta 3 dólares americanos por día; el trabajo agrícola rinde unos 300 dólares por estación. El gobierno de Pyongyang impone multas de casi medio dólar por día por las ausencias en el trabajo. Aún así, permiten a estos nuevos tipos de “fronterizo” ganar más que si estuvieran trabajando en su propio país.

Hace años que el sistema se ha consolidado: según Radio Free Asia, los chinos llaman por teléfono haciendo el pedido; un grupo de contrabandistas elige a las personas y se encarga de transportarlas a través de los ríos Tumen o Yalu, y luego los traen de regreso cuando termina la estación de trabajo. Los contrabandistas reciben 2 dólares por cada viaje.

Junto a este comercio, existe también un contrabando de mujeres norcoreanas, que son vendidas a los chinos como esposas o utilizadas en la industria del sexo.

Pyongyang tiene, de hecho, reglas y castigos severos para quien trata de emigrar. Sin embargo, en el comercio con China  a menudo también participan los guardias fronterizos.