“La Iglesia en China puede crecer también sin relaciones diplomáticas entre China y la Santa Sede” (2)
de AA.VV.

Las palabras del Card. Tong muestran la atención del Vaticano hacia la Iglesia china. Las del card. Zen expresan el pesimismo hacia las relaciones diplomáticas. Continúa el debate en la Iglesia en China sobre los dos artículos publicados hace días. El suceso en las relaciones entre Santa Sede y Vietnam debidos al gran número de católicos presentes en aquel país. Los obstáculos del gobierno chino y de la Asociación patriótica en las ordenaciones episcopales. Segunda parte de una serie de tres.


Roma AsiaNews)- Publicamos aquí la segunda parte (de una serie de tres) de comentarios a continuación de la publicación de un artículo del card. John Tong Hon y uno del Card. Joseph Zen Ze-kiun. El primero optimista sobre la relaciones diplomáticas entre Roma y Beijing, el segundo pesimista; el primero reivindicando la profunda atención de la Secretaria de Estado a la Iglesia subterránea y a los principios católicos; el segundo expresando perplejidad sobre aquello que él define como una “nueva edición de la Ospolitik”. Entre los católicos chinos existen en la práctica posiciones y polarizaciones, signo de la necesidad de un mayor diálogo al interior. Se debe registrar un hecho curioso; después de casi una semana de la publicación de esos artículos, el gobierno chino permanece en silencio. En los meses pasados crecieron las prospectivas de control de todas las religiones (también la católica) sosteniendo la profunda “chinización”, “independencia del extranjero”, apoyo al desarrollo al desarrollo de la patria. Además, las actividades de las religiones pasaron bajo el control de la seguridad pública.(BC).   

 

 Joseph de Shanghai

China cortó sus relaciones diplomáticas con el Vaticano en 1951. La última cosa que China quisiera ver es una Iglesia católica fiel al Papa, a un líder espiritual de nivel mundial. Al inicio China quería seguir el ejemplo de la tradición anglicana, para que los ciudadanos chinos fuesen fieles al Estado, en cambio que a los líderes religiosos del país. Fue esta la razón fundamental de la falta de relaciones entre el Vaticano y China por muchos años.

Además, el Vaticano y China piensan cada uno a lo que es mejor para su Iglesia. El Vaticano no quiere que China frene los esfuerzos en la difusión de la fe católica. Desde el punto de vista de China, el nombramiento de un líder religioso o la de un presidente de una compañía nacional (es lo mismo): el poder de nombrar debería estar en manos del gobierno chino y este principio no debe ser destruido por el Vaticano.

Mirando hacia atrás a los cambios en Europa del Este, también lo que sucedió hace veinte años atrás, la derrota del comunismo en Europa del Este fue vista como una amenaza. Ésta fue un obstáculo psicológico para China en el buscar las relaciones diplomáticas.

Las relaciones entre Vaticano y Vietnam se normalizaron sobre todo porque ambas partes han abierto canales de comunicación formales y oficiales y cada año ellos se comunican en modo directo uno con el otro. En Vietnam, una larga parte de la población es católica. En cambio, en China, menos del 1% de la población es católica. De tal modo el Vaticano trata de establecer relaciones diplomáticas con el gobierno chino, su posición es más bien débil y de poca influencia. Además el comportamiento de Mons. Taddeop Ma daqin (quien dimitió de la Asociación patriótica- ndr) dejó una herida traumática en el gobierno.

En el pasado, el derecho de nombrar a los obispos siempre fue un problema. Ahora no parece más. Los católicos clandestinos criticaban por esto al gobierno chino de manera pesada. ¿Cuál es la posición del Vaticano hacia los fieles chinos y la Iglesia china?

El artículo del card. Tong muestra la actitud del vaticano hacia la Iglesia china. En el artículo del Card. Zen, sus palabras representan la visión pesimista de muchos católicos chinos hacia las relaciones chino-vaticanas.

Si los obispos de la Iglesia católica subterránea pueden ser integrados en la Conferencia episcopal china. Por esto, la Asociación patriótica está haciendo de todo y en modo pesado para alentar al gobierno a ser más ruda con la Iglesia subterránea y con el Vaticano. De otro modo, la gente de la Asociación patriótica perdfería el propio empleo.

Desde el punto de vista del Vaticano, los canales de comunicación entre la Santa Sede y la Iglesia subterránea no son fáciles. Algunas veces el estilo de los obispos no concuerda con las expectativas del Vaticano, pero la Santa Sede no puede hacer mucho. Si el Vaticano establece relaciones diplomáticas con China, podría ganar más control sobre la  Iglesia subterránea. China tiene el mismo problema, o sea una cierta incapacidad de gestionar a la Iglesia subterránea. Parece casi que Vaticano y China encuentren un terreno común sobre este tema.

Voces que las relaciones diplomáticas fueron establecidas se difundieron en abundancia desde 1999. Hasta hoy muchos medios gritan que esto sucederá pronto, pero luego todo termina en la nada. Yo no creo hasta que no vea un acuerdo o un contacto firmado en papel y pluma.

 

P. Tang (China del Sur)

El artículo del Card. Tong es muy racional y positivo. De todos modos, aquello que la Iglesia más necesita es de vivir el espíritu del Evangelio. La Iglesia antigua, se bien haya experimentado tremendas persecuciones, igualmente se desarrolló en modo rápido. En confrontación a cuánto vivido por la Iglesia antigua, no es un gran problema para la Iglesia en China encontrar persecución hoy. Por lo tanto, el desarrollo de la Iglesia china no está relacionada con el construir relaciones diplomáticas entre China y Vaticano. En el espíritu del Evangelio, la Iglesia se desarrollará también sin relaciones diplomáticas. Y sin el espíritu del Evangelio, la Iglesia no podrá desarrollarse, también sin relaciones diplomáticas.

 

Para la primera parte, cliquea aquí.