Yakarta: Amnistía fiscal para repatriar el capital que se tiene en el extranjero
de Mathias Hariyadi

Bajo la nueva ley decidida por Joko Widodo a los evasores ricos se les perdona las violaciónes anteriores. La obligación es traer de vuelta todos sus activos a Indonesia y declarar que el Estado, son multados. En crisis los ricos, contadores en alerta.


Yakarta (AsiaNews) - Aumentar el número de los que pagan impuestos, repatriar los capitales mantenidos en el exterior, aumentar la inversión en Indonesia y consolidar el presupuesto público. Estos son los objetivos de la nueva amnistía de impuestos decidida por el gobierno Joko Widodo, dirigido a perdonar a los evasores del pasado para asegurar más ingresos en el futuro.

Con el nuevo procedimiento, todos los ciudadanos de Indonesia que han evadido en el pasado están obligados a declarar los bienes al Estado. En el caso de que la declaración no sucede antes de septiembre, se establecerá una tasa que varía de 2 a 4% de su capital. Si antes de diciembre la declaración no se ha llevado a cabo la multa se elevará al 5%, y un 10% si los documentos no son entregados antes de marzo de 2017. En la actualidad, las sanciones totales pagadas ascendieron a 947 mil millones de rupias (unos 71,5 millones de dólares ).

Con esta maniobra Yakarta tiene como objetivo recuperar los fondos ocultos en el exterior. Sri Mulyani, ministro de Finanzas, dice que los ahorros depositados en el extranjero serán repatriados principalmente de Singapur. Al 20 de agosto, el importe de los fondos declarados por los ciudadanos de Indonesia en la ciudad-Estado ascendió a 6 billones de rupias, y va en aumento.

El ministro confirmó que las autoridades de Singapur apoyan toda la maniobra de Yakarta y que "no hay ninguna regla o política financiera de Singapur, que dificulte la nueva amnistía de impuestos".

El segundo país en el que los ahorradores indonesios mantienen sus mercancías es el Reino Unido, con al menos 140 millones de rupias.

La nueva política decidida por Joko Widodo ha alterado el modo de acción de muchos indonesios ricos que ahora se están preguntando cómo comportarse frente a la posición del gobierno. Mientras que el tiempo se considera crítico por los evasores, la nueva ley representa una oportunidad para la clase de los contadores, que de un momento a otro se encontró llena de trabajo.

Un contador católico, que desea permanecer en el anonimato, dijo que nunca antes como en las últimas semanas ha tenido tanta reuniones con personas ricas que piden consejos sobre cómo moverse en el nuevo escenario.