Medios de tierra han invadido la pequeña ciudad situada más allá de la frontera, en pleno territorio sirio. Ankara “quiere atacar a los milicianos del Estado islámico”, pero los yihadistas ya dejaron la zona. El objetivo turco son los kurdos sirios y bloquear el nacimiento de un enclave autónomo. En la zona se juega el partido de las alianzas y se consuma el brazo de hierro entre EEUU y Turquía.
Jarablus (AsiaNews)- El ejército turco invadió la ciudad de Jarablus, un poco adentro de la frontera en pleno territorio sirio; el área está rodeada por medios de Ankara, que han atacado la zona para golpear a los milicianos del Estado islámico (EI). Sin embargo, fuentes locales refieren que los yihadistas escaparon a tiempo y que, por el contrario, se multiplican los muertos entre la población civil, víctimas de los bombardeos que precedieron a la invasión, con cantidad de cadáveres abandonados en las calles.
Entrevistado por una TV árabe, un habitante de Jarablus, llamado Sabri Osman refiere que hay “sólo 13 miembros de Daesh (acrónimo árabe del Estado islámico) “presentes” en la ciudad; la invasión turca continúa y la zona norte está destruida.
Fuentes locales explican que los medios del ejército de Ankara entraron por el oeste y el norte y rodearon el área. La invasión turca es casi toda completa. Los bombardeos de las últimas horas, agregan las fuentes, eran “falsas” porque la mayor parte de los yihadistas “ya había escapado”.
En las primeras horas de la mañana de hoy, en respuesta a los bombardeos turcos de ayer, partieron misiles de Jarablus en dirección de la frontera, que han centrado el pueblo turco de Karkamish. Ankara ordenó la evacuación completa de los habitantes de Karkamish y los otros seis pueblos limítrofes.
En Karkamish surge una base de las milicias sirias anti-gubernamentales y de hace días a través de un pasaje secreto en la frontera turca se asiste al paso de armas y de hombres, en preparación del ataque por tierra de hoy contra Daesh en Jarablus.
Por el momento se está realizando una verdadera y auténtica carrera para ver quién podrá ocupar antes Jarablus y expulsar a las milicias de Daesh, que hasta hace poco tiempo habían controlado la ciudad con la protección de Turquía, es decir, poco antes del fallido golpe contra Erdogan. La ciudad es codiciada también por los kurdos sirios, asistidos por expertos en guerra americanos, del así llamado Ejército libre sirio (Free Syrian Army, compuesto no por ex militares del ejército regular sirio, sino por milicias organizadas por Turquía) y por el ejército de Damasco. Hace unos días en el escenario de Jarablus ha aparecido también Turquía.
La derrota inminente de Daesh en Jarablus, último bastión del Ejército Islámico en la frontera sirio-turca, en este punto ya es inevitable; sólo resta descubrir "cuándo" y "por quién". En los sitios web yihadistas surgen proclamas de una feroz resistencia hasta el final; sin embargo, los habitantes locales hablan de escape de los combatientes del Califato, que estaban asignando alrededor de Jarablus. De acuerdo con informes del Observatorio Sirio para los Derechos Humanos, las familias de los combatientes Daesh ya se han trasladado fuera de la ciudad y se encuentra en El Bab, cerca de la capital del "Califato" Raqqa.
Fuentes de AsiaNews en Beirut informan que ayer 15 expertos militares de Estados Unidos viajaron a las líneas divisorias con Jarablus, para un estudio del terreno que se extiende desde Zor Mghar hasta el pueblo de Shuyuj, al oeste, con el fin de asegurar el frente en la zona de batalla. La batalla en tierra es inminente.En Jarablus antes de la guerra vivían 100 mil habitantes (la última cristiana, ortodoxa armenia, fue muerta por Daesh el año pasado), compuesto por 80% árabes, turcomanos 10%, 5% de cristianos armenios y 5% de kurdos. La ciudad cayó bajo el control del EI en el 2014 y de las primeros 100 mil habitantes el número pasó a 4.500 hoy, gobernados por 40 jefes de Daesh.
Ankara está profundamente preocupado porque la ciudad de Jarablus puede caer bajo el control de los kurdos sirios, la última pieza que falta para completar el mosaico de una región autónoma kurda en Siria. Con el apoyo, de acuerdo con la prensa turca, de los Estados Unidos. El gobierno turco en lugar de luchar contra Daesh tiene la intención de evitar que los kurdos ocupen la zona y por eso apoya al Ejército Libre de Siria. Este se compone de 400 combatientes de Failaq El Sham, y Liwaa al Sultan Murad (la unidad de Murat Sultan), Harakat, Nur el Din Zangi y Ahrar Al Sham El (Los Liberadores de Damasco). Todos agentes bajo la marca del FSA.
Los combatientes Daesh en Jarablus se componen de dos grupos: un grupo que opera bajo el mando de los servicios secretos turcos, el llamado control de los grupos unidos del Éufrates, que forma parte del Ejército Libre de Siria, dirigida por un coronel desertor del ejército sirio regular, Yussef al Hader, que murió en Alepo, en la Academia de infantería por mano de la FSA. Y un segundo grupo de combatientes que se escapó de primero, porque es demasiado dependiente de Turquía y se unió al grupo armado Kassad bajo la dirección de Abdel Sater Al Jader. Elegido el pasado 22 de agosto de jefe del Consejo Militar de Jarablus, Abdel Jader Al Satter fue asesinado en circunstancias misteriosas unas horas después de haber emitido una declaración en la que pedía proteger la zona contra la interferencia de Ankara. Él acusó a Turquía de haber enviado en los últimos días a Jarablus muchos miembros de Daesh través de los pasajes con Turquía.
La batalla de Jarablus no será sólo una cuestión de control territorial, sino un enfrentamiento entre los EE.UU. y Turquía. La fuerza aérea de Estados Unidos sobrevuela y bombardea las posiciones de Daesh en Jarablus, pero según fuentes kurdas que se reunieron en Beirut, los Estados Unidos también podría afectar a las facciones de los hombres armados del llamado Ejército Libre de Siria. La batalla comenzó, las alianzas están cambiando.