China, muriĆ³ el obispo de Taizhou: era reconocido por el Papa y por Beijing
de Zhen Yuan

El prelado, Mons. Antonio Xu Jiwei, falleció por una enfermedad a los 81 años. Si bien ingresó en el seminario en 1948, no fue ordenado sacerdote sino hasta 1985, debido a los “eventos políticos” de China. Pasó varios años en la cárcel y haciendo trabajos forzados: “Ese período fortaleció mi fe. Entendí que Dios está conmigo cada día”. La diócesis sólo tuvo dos obispos: el predecesor fue Mons.  Jou Hou-shan, uno de los primeros obispos chinos ordenados por Pío XI. 


Taizhou  (AsiaNews) – El obispo Antonio Xu Jiwei, de la diócesis de Taizhou (provincia de Zhejiang), falleció ayer a los 81 años, a causa de una enfermedad. Había sido consagrado obispo con el mandato papal del 2010 y era reconocido como tal por el gobierno chino. El obispo Xu murió tres semanas después de fallecer Mons. Vincenzo Zhu Weifang de Wenzhou, diócesis lindante dentro de la misma provincia. La misa de réquiem de Mons. Xu se llevará a cabo el próximo 29 de septiembre a las 7.30 de la tarde, mientras que su funeral será a las cinco de la mañana del día siguiente.

Nacido en 1935 en Shanghái, Antonio Xu Jiwei decide seguir su llamada al sacerdocio a la edad de 13 años. Estudia en el seminario de Ningbo y en el de Xujiahui, en Shanghái. Siempre fue fiel y estuvo resuelto a ofrecerse a sí mismo para servir a Dios incluso en tiempos de dificultad, como bien relata un elogio fúnebre de la diócesis de Taizhou. Ingresa al seminario de Ningbo en 1948. Más tarde se traslada a Shanghái, y permanece en ese seminario hasta 1958. Desde 1960 y hasta 1985, a causa de los eventos políticos que suceden en China, es condenado a cinco años de prisión y luego a largos años de trabajos forzados. En este período se desempeña durante seis años como docente de liceo.

En 1985 se le revoca la licencia y es enviado a Shanghái. Aquí se une al seminario regional de Sheshan, junto al primer grupo de seminaristas al que le es otorgado un permiso para estudiar. La mayor parte de ellos eran ex seminaristas, que durante la Revolución Cultural habían sido obligados a abandonar sus estudios.  En 1985 es ordenado sacerdote para la diócesis de Ningbo, pero permanece en Sheshan para enseñar. En 1987 vuelve a la diócesis, donde trabaja como pastor. En marzo de 1999 es transferido a Taizhou como administrador diocesano y párroco de la iglesia de Jiaojiang. En julio de 2010 es consagrado obispo de la misma diócesis.

Una vez, Mons. Xu dijo: “El período en que estuve preso fortaleció mi fe. En esos años de grandes dificultades rezaba todos los días… Entendí que Dios me ama profundamente y que Él está conmigo cada día”.

La diócesis de Taizhou es famosa en la historia de la Iglesia china porque su primer obispo, Mons.  Jou Hou-shan, estaba en el grupo de los primeros seis obispos chinos que fueron ordenados por el Papa Pío XI en octubre de 1926. En 1926 ésta se vuelve Vicariato apostólico, separada de Ningbo, y desde entonces ha tenido solamente dos obispos: Mons. Jou y Mons. Xu. El primero murió en 1962, y a partir de ese momento la sede episcopal permaneció vacante hasta el año 2010. Ahora ha vuelto a quedar vacante.