Hanói, el parlamento aprueba la ley sobre las religiones. Límites a la libertad de culto

La norma recibió el 85% de votos favorables. La decisión entrará en vigor el 1 de enero de 2017. Desde abril hasta ahora, la ley llegó a la séptima elaboración. La Iglesia católica y activistas por los derechos humanos habían subrayado las violaciones a la libertad; temores de conflictos sociales.


Hanói (AsiaNews/EdA)- La Asamblea nacional vietnamita aprobó la nueva “ley sobre los cerdos y las religiones”. La votación final se realizó el 18 de noviembre pasado; 417 diputados sobre 439 (84,7%) se declararon a favor de la nueva disposición, que llegó a la séptima versión, que entrará en vigor a partir de 2017.

Por el momento las comunidades religiosas no han realizado comentarios sobre la aprobación de la ley compuesta por 9 capítulos y 68 artículos. Diversos periódicos de la prensa oficial, como el cotidiano Nhan Dan (el pueblo), describieron en términos analistas a la ley, pero sin dar juicios críticos. Según algunos periodistas, diversos diputados han juzgado “inútiles e irrelevantes” los pasajes de la decisión que tratan sobre las actividades religiosas en las cuales están involucrados los ciudadanos extranjeros.

Desde su fundación, el Partido comunista vietnamita siempre publicó textos de reglamentación de las actividades religiosas. Los primeros actos fueron volantes mimeografiados escritos por el Partido de los trabajadores (cuando era aún clandestino). El primer texto oficial es del año 1956 y fue firmado por Ho Chi Minh. A un liberalismo de fachada siguió la política de opresión que caracterizó la actitud de Partido, sobre todo en relación con el catolicismo.

 El segundo documento (decreto 297/CP) fechado en 1977 y firmado por el Premier. Este permaneció por mucho tiempo como texto fundamental para la legislación sobre las religiones. Después de una serie de decretos menores, en 2004 entró en vigor la Ordenanza sobre los credos y las religiones. La característica de esta decisión es su aprobación por parte del parlamento, que le confirió una legitimidad superior a las leyes precedentes (al menos de fachada).

El proyecto de la nueva ley inició el 22 de abril de 2015, cuando la Oficina de asuntos religiosos envió a todas las comunidades religiosas la cuarta versión de una ley hasta ese momento desconocida. En las semanas sucesivas, líderes caodaístas y católicos criticaron en modo decidido el borrador juzgándolo un “encarcelamiento” de las religiones, pero la Asamblea nacional decidió llevar adelante el proyecto.

El proyecto de ley reapareció en el pasado agosto, cuando una nueva versión fue enviada a las comunidades religiosas, que han tenido menos de dos semanas para presentar eventuales modificaciones. En una larga carta, la Conferencia episcopal subrayó los pasos delante del borrador y las injerencias residuales. Con la nueva ley sobre las religiones la Iglesia católica será reconocida como personalidad jurídica y podrá abrir institutos educativos; pero al mismo tiempo el Estado no prevé la posibilidad de construir nuevas iglesias y mantiene la obligación de los permisos sofocantes para desarrollar las actividades religiosas.

Según diversos activistas por los derechos humanos el texto de la ley contiene aún demasiadas violaciones de la libertad religiosa y causará nuevos conflictos sociales.