Wellingtton: positivo el plan de Kuala Lumpur para el apoyo y la formación de los Rohingya
de Joseph Masilamany

El ministro neozelandés para la inmigración en visita oficial a Malasia. Garantizar cursos de formación e iniciación al trabajo para abrir las puertas del mercado. Desde 2005, Nueva Zelandia proveyó en la recolocación de 1997 refugiados procedentes de Myanmar, entre los cuales 277 Rohignya.


Kuala Lumpur (AsiaNews)- El proyecto iniciado por el gobierno de Kuala Lumpur, que trata de garantizar cursos de formación y de inicio al trabajo a los inmigrantes musulmanes Rohingya, es una idea positiva y que hay que apoyar. Es cuánto afirma el ministro neozelandés para la Inmigración, Michael Woodhouse, en estos días en visita oficial a Malasia. El objetivo del ejecutivo es transformar a los migrantes en trabajadores semi-calificados y abrir a ellos las puertas del mercado interno y regional.

Woodhouse ha elogiado el plan iniciado por las naciones del Sudeste asiático para garantizar un mínimo de formación a los Rohingya, normalizando también los derechos en el contexto del mercado del trabajo. Un plan que sería aplicado a todos los migrantes que han ingresado al país.

Interpelado por los cronistas después de haber visitado el centro educativo de Tzu Chi, en Kuala Lumpur, el ministro neozelandés de la inmigración confirmó el propio apoyo al proyecto, augurándose que “tenga suceso”. “Entiendo las preocupaciones-agregó- de algunos sobre la normalización de los derechos en el campo de trabajo, que podría alentar a otros a hacer la misma elección de la inmigración. Sin embargo, con toda honestad no veo en esto un riesgo significativo”.

Los Rohingya son una minoría musulmana de Myanamar-poco más de un millón de personas-originaria del vecino Bangladesh, a la cual las autoridades de Naypyidaw no les reconoce tengan ciudadanía y cuyos miembros habitan en campos prófugos esparcidos en varias partes del país.

Desde el inicio de octubre, se propagaron nuevas violencias. El balance habla de al menos 90 personas asesinadas y unos 34 mil evacuados, con el gobierno birmano que habría tratado de cancelar los numerosos casos de abusos cometidos. La población Rohingya denuncia ejecuciones sumarias, arrestos arbitrarios, violaciones, casas quemadas.

En el curso de la visita oficial en Malasia, Woodhouse se encontró con el vice Premier, Ahmad Zahid Hamidi, al cual renovó el apoyo en la obra de nueva colocación en terceras naciones, entre las cuales la misma Nueva Zelandia. Zahid precisó que el proyecto de formación profesional involucrará a 56 mil inmigrantes, titulares de la carta refugiados del Alto comisariado Onu para los refugiados. (UNHCR)

Interpelado sobre la posible apertura al ingreso de nuevos Rohingya en Nueva Zelandia, Woodhouse, explicó que la situación está siendo examinada por las autoridades de Wellington que están estudiando la cuestión. Nueva Zelandia es uno de los 26 países que adhirieron al programa Onu de nueva colocación de los refugiados. Cada año el país recibe a unas 750 personas, el 15% de las cuales son migrantes Rohingya provenientes de Malasia. Desde 2005, Nueva Zelandia proveyó a la recolocación de 1997 refugiados provenientes de Myanamar, entre los cuales 277 Rohingya.