Mensaje a la 17° Conferencia contra el tráfico de personas, en curso en Viena, promovida por la OSCE. Hacer “todo lo posible” para aumentar la conciencia sobre esta plaga y “coordinar mejor” los esfuerzos legales y sociales “para salvar a millones de niños y adultos”.
Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- Se necesita determinación para “erradicar” el tráfico de personas, grave “forma de esclavitud” moderna y “vergonzosa plaga” de la humanidad. Los escribe el papa en un mensaje a la 17° Conferencia contra el tráfico de personas, en curso en Viena, promovida por la OSCE.
Es tiempo, escribe, de poner fin a un tráfico, especialmente el de los niños “que representa uno de los más vergonzosos fenómenos que golpea en la cara de la moderna humanidad”.
Es “chocante”, “escandaloso”, continúa el mensaje, descubrir que el tráfico de personas sucede en todos los países y que representa “uno de los más proficuos negocios del planeta”. Se trata, reafirma Francisco, “de una forma de esclavitud, de un crimen contra la humanidad, una grave violación de los derechos humanos, una plaga atroz, que debe ser condenada con aún más fuerza cuando se refiere a los niños”.
Dirigiéndose a los representantes de las naciones que participan en la conferencia- centralizada en el tema: “El tráfico de niños y el superior interés de la infancia”- el Papa los exhorta a hacer “todo lo posible” para aumentar la conciencia sobre esta plaga y “coordinar mejor” los esfuerzos legales y sociales “para salvar a millones de niños y adultos”. Aún más se necesita comprometerse para “impedir” que tantas personas sean víctimas del tráfico y “esclavizador”. Francisco se augura que se ponga fin al “crimen terrible” del tráfico de seres humanos en el país del OCSE.
El mensaje fue leído por el p. Michael Czerny, sub-secretario de la Sección migrantes y refugiados del ministerio para el Servicio al desarrollo humano integral. En su intervención, el p. Michael Czerny subrayó la preocupación por los esfuerzos hasta ahora insuficientes para contrastar un fenómeno terrible como el del tráfico de los seres humanos. En particular, él puso el acento en tres puntos: prevenir el tráfico, proteger a las víctimas y perseguir a los criminales. A la base de todo, está la urgencia de poner al centro a la persona humana con su valor inestimable. El p. Czerny mencionó los numerosos pronunciamientos e intervenciones realizadas por el Papa Francisco en favor de los niños, víctimas de esta nueva esclavitud. Por lo tanto, reafirmó la necesidad de una fuerte colaboración entre todos-instituciones, organizaciones religiosas, medios- para realizar acciones valientes contra el tráfico de los seres humanos.