Moon Jae-in encuentra al enviado del Papa y autoriza las ayudas humanitarias al Norte

El presidente sudcoreano se encontró con el arzobispo, Hyginus Kim Hee-joong portador de un mensaje suyo al Papa Francisco. La nueva administración autorizó a algunas organizaciones civiles y religiosas a preparar las ayudas que serán enviadas al Norte. Circunstancia confirmada por fuentes de AsiaNews.


Seúl (AsiaNews)- El presidente sud-coreano Moon Jae-in fue informado por el enviado especial en el Vaticano sobre su reciente encuentro con el Papa Francisco. El encuentro se realizó en forma oficial. A pocas horas de la vida del presidente de EEUU, Donald Trump en el Vaticano, el arzobispo Hyginus Kim Hee-joong que consignó una misiva suya en manos del Papa Francisco, en el cual el nuevo presidente de Corea del Sur reafirmaba la voluntad de diálogo por la paz con el Norte, no obstante las continuas provocaciones de su homólogo Kim Jon-un.

Sin la necesidad de una intervención de mediadores externos. Hyginus Kim Hee-joong volvió a casa después de un viaje de 7 días a la Santa Sede, durante el cual se encontró 2 veces con el Pontífice. Un particular que Moon quiso subrayar. Hyginus Kim Hee-joong afirmó que el Papa manifestó su profundo interés por Corea del Sur y su Iglesia. El Papa Francisco invitó a Moon a visitarlo al Vaticano, donde será siempre bienvenido. Se supo que en su carta el católico Moon había también pedido al pontífice rezar por Corea del Sur para que mejoren sus relaciones con Corea del Norte comunista. Corea del Sur y el vaticano establecieron relaciones diplomáticas en 1963, pero Hyginus Kim Hee-joong fue el primer enviado principal sudcoreano al Vaticano que se tenga memoria.

Moon se comprometió en la delicada misión de reabrir un canal diplomático con Corea del Norte. En la búsqueda del diálogo con Pyongyang decidió valerse de la colaboración de organizaciones humanitarias y religiosas, autorizándoles justamente en sus proyectos de ayudas al Norte. Una circunstancia confirmada por fuentes de AsiaNews. Una actitud de apertura en neta discontinuidad con la rigidez adoptada por el gobierno conservador de su predecesora Park Geun Hye, luego destituida y terminada bajo proceso por graves episodios de corrupción.

Los contactos no autorizados con los norcoreanos o las visitas al Norte son punibles con la cárcel también en el Sur. Pero el Ministerio de la Unificación  dio en estos días luz verde a los primeros proyectos de ayudas humanitarias. Único límite las sanciones internacionales contra Corea del Norte que no pueden ser desoídas. “La posición del gobierno  permanecerá flexible en el gestionar los intercambios humanitarios hasta que no será comprometido el régimen sancionatorio internacional contra el Norte”., evidenció la vocero del ministro Lee Eugene. Entre las emergencias que hay que enfrentar está la difusión de la malaria en los territorios de frontera, al fin de prevenir la difusión de los mosquitos infectados hacia el Sur.

El neo-encargado dirigente del ministerio de Exteriores, Kang Kyung-wha dijo que es necesario buscar sanciones “más potentes” contra Corea del Norte en el caso el régimen ponga en acto nuevas provocaciones. Sin embargo, también remarcó. “es un principio universal el de dar ayuda humanitaria donde sufran seres humanos”. Kang, que trabajó en las Naciones Unidas por unos 10 años, a la pregunta si cree que la ayuda humanitaria al Norte deba ser dado no obstante las continuas provocaciones y las aspiraciones nucleares de Pyongyang, dijo “sí”, agregando que está en línea con el espíritu de los valores de las naciones Unidas extender la ayuda “a quien la necesite”.

Moon Jae-in  está adquiriendo autoridad en su patria y también a nivel internacional si bien con sobriedad y de atención a los derechos civiles que introdujo en su administración. De hecho no pasó inobservado que el nuevo presidente sudcoreano haya decidido pagar de su propio bolsillo los gastos relacionados con su familia en cambio del balance nacional y que el dinero ahorrado será empleado para crear puestos de trabajo para ayudar a los marginados. Llamó mucho la atención pública también el lanzamiento de la campaña sobre los derechos humanos que apuntará a la auto-reforma de los órganos de policía. Moon declaró que quiere tomar en serio las relaciones de la Comisión nacional para los derechos humanos de Corea. Una actividad que era considerada una pura formalidad de las precedentes administraciones.