Hermana de la India: los niños de la calle merecen un futuro
de Santosh Digal

La Hermana Alice Kakkattupilliyil pertenece a las Hijas de la Caridad. Desde el 2015 está en la formación de 160 niños de cuatro a 12 años. La mayor dificultad es que a menudo los niños no quieren ir a la escuela. "Uno tiene que guiarlos con tenacidad y asistirlos con optimismo, paciencia, amor y cuidado."


Lucknow (AsiaNews) - Los niños de la calle "se merecen un futuro mejor, así como todos los otros que tienen más oportunidades de crecimiento." Es el convencimiento de la Hermana Alice Kakkattupilliyil, 50 años, de las Hijas de la Caridad (también conocidas como "Canosianas"). La misionera trabaja para educar a niños de la calle en la Diócesis de Lucknow, capital de Uttar Pradesh, el Estado más poblado de la India. A AsiaNews dice: "Los niños que se ven obligados a actividades de sexo, por las familias o los proxenetas merecen la educación, una vida mejor y un futuro humano digno."

Desde 2015, la religiosa labora, junto con un colaborador laico con 160 niños de cuatro a doce años que nunca han oído o visto una lección de la escuela. "Nuestro primer objetivo - dice - es inculcar en ellos el deseo de aprender y motivarles a encontrar su propio camino. La educación es el único camino. Después de haber sido formados con conocimientos básicos, motivaciones, pequeñas normas de saneamiento, lo más importante a perseguir es la educación. Ellos están inscritos en escuelas públicas o privadas, donde pueden obtener subsidios, tales como becas o donde algunos benefactores locales están dispuestos a pagar sus cuotas escolares".

La principal dificultad encontrada por la monja "es que los niños a menudo no quieren seguir estudiando o no quieren ir a la escuela. Para ello hay que seguir guiándolos con tenacidad y perseguirlos con optimismo, paciencia, amor y cuidado, porque no hay en ellos un deseo innato de aprender y seguir las lecciones". Con el tiempo, dice, "los menores se rinden ante la importancia de la educación. A pesar de que han pasado su vida en la calle, no se ha dicho que deben permanecer allí para siempre".