El ISIS reivindicó el atentado en Manhattan: Saipov es un ‘soldado nuestro’

Ayer se difundió la declaración en el sitio de propaganda del grupo islámico. El atentado fue planeado con un año de antelación. Imán local: conocía mal su religión 


Taskent (AsiaNews/Agencias) – Sayfullo Saipov, autor del atentado ocurrido el 31 de octubre pasado, es un “soldado” del Estado Islámico (EI). La confirmación de dicho nexo y la reivindicación del ataque fueron dadas a conocer ayer a través de Al-Naba, el sitio de propaganda del ISIS, donde se relata que “uno de los soldados del EI ha atacado a los cruzados en una calle de Nueva York”. El vínculo con el ISIS ya había sido reivindicado por el mismo Saipov durante el interrogatorio al que fue sometido.

El atacante uzbeko, que estaba viviendo en los EEUU desde el año 2010, ya había confirmado su pertenencia al grupo islamista en cuyo nombre había actuado, llegando incluso a pedir que se le permita exhibir la bandera del ISIS en la habitación del hospital donde estuvo internado. Saipov declara estar “contento” por el atentado, que fue planificado con más de un año de antelación: optó por un camión con la intención de provocar la mayor cantidad de víctimas posible.

Los testimonios recogidos señalan, cada vez con mayor claridad, que Saipov, al llegar a los Estados Unidos, se fue radicalizando de un modo progresivo. Al llegar al país, el uzbeko intentó desempeñarse en diversos trabajos: primero vivió en Nueva York, luego estuvo tres años en Ohio, luego se mudó a Florida para instalarse finalmente en Paterson, Nueva Jersey.  Su último empleo fue como chofer en la empresa de traslados Uber. Las declaraciones de quienes llegaron a conocerlo denotan una radicalización iniciada en Ohio, que se tornó peor durante el período transcurrido en Tampa, Florida, adonde se mudó en 2013. El imán de una mezquita local declaró al New York Times que Saipov “conocía mal” su propia religión y que mostraba un temperamento difícil.

Saipov está incriminado por dos cargos de acusación: violencia y destrucción de vehículos, en apoyo de una organización terrorista extranjera. La pena prevista que afronta es la cadena perpetua, lo cual ha sido confirmado por el procurador, quien además no excluye la posibilidad de aplicar la pena de muerte. El mismo presidente norteamericano Donald Trump ha amenazado con  una condena semejante. Pero el Estado de Nueva York no prevé la pena capital: el gobierno federal debería utilizar una ley excepcional, en cuyo caso se requerirían años para lograr la efectiva aplicación.