Mohammed bin Salman lanza 'guerra total' contra Irán

Según el príncipe hereditario saudita, Teherán habría proporcionado los misiles utilizados por los Houthi para atacar el aeropuerto de Riad. La "agresión directa" es similar a un "acto de guerra". La República Islámica niega los cargos y condena las "acciones provocadoras" de los sauditas. La estabilidad del Líbano está en juego, un nuevo frente de la guerra por el poder.


Riad (AsiaNews / Agencias) - Mediante el suministro de armas a los rebeldes Houthi en Yemen, Irán ha cometido un acto de "agresión militar directa" contra Arabia Saudita. Así lo aseguró ayer el príncipe heredero saudí - y el número dos en el reino - Mohammed bin Salman (Mbs), al comentar el reciente derribo de un misil cerca del aeropuerto internacional de Riad. Durante una conversación telefónica con el ministro de Relaciones Exteriores británico, Boris Johnson, Mbs dijo que "se puede considerar un acto de guerra".

De acuerdo con algunos medios de comunicación cercanos a las Houthi, el 6 de noviembre rebeldes chiíes lanzaría un portador balístico Burkan H2 con la intención de golpear el aeropuerto internacional de King Khaled en Riad, a 850 km de la frontera con Yemen. El sistema defensivo saudita interceptó y abatió el misil en vuelo, pero algunos fragmentos cayeron en el área de la orilla.

Una réplica inmediata de Irán, que niega enérgicamente cualquier participación. El ministro de Relaciones Exteriores de Teherán, Mohammad Javad Zarif, juzga las "palabras" usadas por Mbs de peligrosas. Él también condena lo que llama "actos de provocación" por los saudíes y reitera que el ataque aeropuerto de Riad es una "acción independiente" llevada a cabo por los Houthi en respuesta a la "agresión" de la coalición árabe con el liderazgo saudí.

Desde la represión interna contra (potenciales) oponentes que culminó en la ola de arrestos de los últimos días, a la total confrontación con Irán en el Oriente Medio, el príncipe heredero saudí ha dado una escalada de la política agresiva que caracteriza el mandato. Recientemente, el brazo largo de Mbs también ha llegado a Beirut - considerado hostil por los (supuesto) ataques hechos por el movimiento chiita libanés Hezbolá - provocando la dimisión del primer ministro Saad Hariri.

Él también ocupa el cargo de Ministro de Defensa y es el principal promotor y constructor de la intervención saudita en Yemen. Desde marzo de 2015, la nación árabe está sacudido por una guerra sangrienta que ha provocado casi 9 mil víctimas de los cuales el 60% son civiles, una grave crisis alimentaria, el analfabetismo infantil y la peor epidemia de cólera en el mundo.

En respuesta al ataque partido desde Yemen, el liderazgo saudita ha decidido cerrar las fronteras terrestre, marítima y aérea, lo que reforzará aún más el bloqueo. Riad dice que la ayuda continúa funcionando, a pesar de procedimientos rígidos; una tesis negada por las Naciones Unidas según la cual todos los vuelos humanitarios están bloqueados, con graves consecuencias para la población civil.

En este momento el Pentágono ha relanzado las palabras de Mbs, que estarían “mostrando" el papel de Irán en Yemen y el suministro de sistemas aéreos de misiles a los rebeldes chiitas Houthi de Teherán. El mismo presidente de EE. UU., Donald Trump, apoyó firmemente la acción del príncipe hereditario, tanto en política exterior como en la administración de asuntos internos.

Tanto para Washington como para Riad, el objetivo principal sigue siendo contrarrestar la influencia de la República Islámica en la región. De ahí la decisión de llevar a cabo guerras por el poder en Siria, en Yemen y en el Líbano. El último frente, abierto con la dimisión del primer ministro Hariri, podría volar el frágil equilibrio del país y desencadenar un conflicto a gran escala con la participación de Hezbolá e Israel. Los analistas y expertos comparan la contraposición entre Riad (sunita) y Teherán (chiíta) con la "Guerra Fría" que ha visto involucrados a la Unión Soviética y los Estados Unidos. Sin embargo, por ahora juzgaron conflicto "poco probable" un conflicto abierto entre las dos principales naciones del mundo musulmán, lo que tendría consecuencias dramáticas no sólo en el Oriente Medio.