Papa: ¡Atento quién dé escándalo!, porque aleja al pueblo de Dios del Señor

“¡Cuántos cristianos con su ejemplo alejan a la gente!”. “la incoherencia de los cristianos es una de las armas más fáciles que el diablo tiene para debilitar al pueblo de Dios”. “Cada pastor debe preguntarse: ¿cómo es mi amistad con el dinero? O el pastor que busca subir de cargo, su vanidad lo lleva a trepar en vez de ser humildes, benévolos”.


Ciudad del Vaticano (AsiaNews)- Atento aquel que da escándalo, como lo hace el cristiano “no coherente” con el Evangelio o el pastor apegado al dinero que busca “trepar”, porque los escándalos matan las esperanzas, la ilusiones, las familias y alejan al pueblo de Dios del Señor. Lo dijo el Papa Francisco en la homilía de la misa que celebró esta mañana en ña casa S. Marta, comentando el pasaje del Evangelio (Lc 17, 1-6) en el cual Jesús dice: “es inevitable que existan los escándalos”, “pero atento a aquel que a causa de cual vienen”.

Por lo tanto advierte Jesús: “¡Estén atentos a ustedes mismos!”, “o sea estén atentos en dar escándalos. El escándalo es feo porque éste hiere, hiere la vulnerabilidad del pueblo de Dios e hiere la debilidad del pueblo de Dios y tantas veces estas heridas se llevan por toda la vida. Y también no sólo hieren, el escándalo es capaz de matar: mata esperanzas, mata ilusiones, familias y tantos corazones…”

“estén atentos a vosotros mismos”, es una admonición para todos, subrayó Francisco, especialmente de quien se dice ser cristiano y vive como un pagano. Es este “El escándalo del pueblo de Dios”. “¡Cuántos cristianos con su ejemplo alejan a la gente, con su incoherencia, con la propia incoherencia: la incoherencia de los cristianos es una de las armas que tiene el diablo para debilitar al pueblo de Dios y para alejar al pueblo de Dios del Señor. Decir una cosa y hacer otra cosa”. Esta es la “incoherencia”, que da escándalo, que debe hacernos preguntar: ¿Cómo es mi coherencia de vida? ¿Coherencia del Evangelio, coherencia con el Señor?”. Luego Francisco trajo el ejemplo de los empresarios cristianos que no pagan lo justo y utilizan a la gente para enriquecerse o también el escándalo de los pastores en la Iglesia que no se ocupan de las ovejas y se alejan.

“Jesús nos dice que no se puede servir a dos señores, a Dios y al dinero y cuando el pastor está apegado al dinero, da escándalo. Y la gente se escandaliza: el pastor apegado al dinero. Cada pastor debe preguntarse: ¿cómo es mi amistad con el dinero? O el pastor que quiere subir de puesto, la vanidad lo lleva a treparse, en vez de ser benévolo y humilde, porque nla mansedumbre y la humildad favorecen la cercanía con el pueblo. O el pastor que se siente como un señor y manda a todos, orgulloso y no el pastor servidor del pueblo de Dios”. “Hoy –concluyó el Papa- puede ser una bella jornada para hacerse un examen de conciencia sobre esto: ¿escandalizo o no y cómo? Y así podemos responder al Señor y avecinarnos un poco más a Él”.