En anuncio llega en el segundo día de reuniones, que se están desarrollando en Riad. Están presentes 140 líderes de la oposición. El objetivo es hallar una unidad, en vista del nuevo round de coloquios de paz, programado para el 28 de noviembre. Pero el destino de Assad sigue siendo fuente de división.
Riad (AsiaNews/Agencias) – Esta mañana, los diversos grupos que componen la oposición siria llegaron a un entendimiento, orientado al envío de una delegación unitaria a los próximos coloquios de paz, patrocinados por la ONU, que se prevén realizar en Ginebra (Suiza) durante la próxima semana. Un giro importante, que, unido al pacto firmado días atrás con Rusia, Irán y Turquía, para la puesta en marcha de un proceso político “inclusivo, libre, justo y transparente”, confirma los esfuerzos de la diplomacia internacional para poner punto final al conflicto.
El anuncio se produce en el segundo día de reuniones entre los grupos opositores al gobierno, que se están llevando en estos días en Riad (uno de los principales sostenedores de las facciones anti-Assad), con la presencia del enviado especial de las Naciones Unidas, Staffan de Mistura. En la capital saudita se han dado cita 140 líderes de la oposición, con el objetivo de cerrar filas y lograr un acuerdo en vista del encuentro del 28 de noviembre.
Bassma Kodmani, miembro de los grupos opositores, confirma el logro “del acuerdo con los grupos que están presentes en Riad, junto a las plataformas de El Cairo y de Moscú, para la formación de una delegación unitaria que participe en los coloquios de Ginebra”. Hoy se definirán los nombres y el número de representantes de cada grupo, que debieran sumar en total 50 personas.
Hasta ahora, en los coloquios mediados por la ONU había participado el Alto Comité para las Negociaciones (HNC), un grupo que funciona como un paraguas -sostenido por los sauditas-, y que representa a tan sólo una parte de la vasta galaxia de movimientos que se oponen al gobierno de Siria. Fue precisamente esta falta de unidad lo que hizo fracasar reiteradamente los encuentros llevados a cabo en el pasado.
Sin embargo, dentro de esta nueva formación, que surge de los encuentros de Riad, permanecen divisiones sustanciales: una de éstas atañe al destino del presidente Bashar al-Assad, cuya expulsión, para algunos, sigue siendo una condición imprescindible. Firas Al-Khaldi, vocero de la oposición, resalta que “los participantes están de acuerdo en la importancia de la dimisión [de Assad] y de la caída del régimen”, en tanto Rusia expresa reservas sobre este punto.