“Quiero mostrarles la riqueza de la Iglesia de los pobres”. Para el purpurado, el encuentro del Papa con los Rohingyás en Dacca es un “tocar y curar a aquellos que están en la periferia de las periferias, un “ser testigos del Evangelio”. La misión en Asia: diálogo y compromiso con los pobres.
Mumbai (AsiaNews)- El Card. Oswald Gracias, arzobispo de Mumbai, acompañará al Papa Francisco en su viaje a Myanmar y Bangladesh, que comienza mañana. El purpurado y presidente de la Federaciones de las conferencias episcopales de Asia (Fabc) y también miembro del grupo de cardenales llamados por el pontífice para la reforma de la Curia (el así llamado C9).
Hablando con AsiaNews, él explica el sentido del inminente viaje del Pontífice. “Myanmar tiene mucho significado para el Papa Francisco, porque es una Iglesia pequeña: los católicos son unos 700 mil, el 1,28% de la entera nación. Y los católicos viven como una minoría en una nación predominantemente budista. No obstante esto, los fieles tratan o buscan nuevas vías creativas para servir lo mejor posible a las personas y a la sociedad en Myanmar. Sí, la Iglesia es una minoría, pero loso católicos hacen sentir su presencia con su servicio a los pobres y a los desafortunados, defendiendo la justicia y la paz en la sociedad”.
“También en Bangladesh-agrega- los católicos son una minoría, igualmente sirven a la sociedad y a la nación a través del apostolado en la educación, se ocupan de la salud y en el desarrollo. Supe de la noticia que el Papa se encontrará en Dacca con los Rohingyás. Este tocar las llagas de Cristo, este tocar y curar a aquellos que est´n en la periferia de las periferias es real la presencia de Jesús, el ser testigos del Evangelio”.
“En Asia-concluye- la misión de la Iglesia es estar en continuo diálogo: diálogo con las culturas, con las otras religiones, con los pobres. Y es una única misión. La Iglesia en Asia es muy activa con medidas concretas al servicio de los pobres y de los emarginados. La evangelización se realiza a través de gestos concretos de caridad hacia los pobres”.
El Card. Gracias, que fue un estrecho amigo de Madre Teresa, fue también él un amigo de los pobres y a menudo “tocó las llagas de Jesús” en los pobres como sacerdote y también como cardenal.
Ayer el purpurado celebró sus 10 años como cardenal. “Mi alegría más grande-dijo- es servir a la Iglesia en Asia. Acompañando al Papa Francisco a Myanmar y Bangladesh tendré la posibilidad de mostrarle la riqueza de una Iglesia de pobres”.