El 45% de los remedios esenciales son “completamente inaccesibles”. Remedios diluidos, servicios de laboratorio precarios e instrumentos reutilizados. Desde hace 6 meses, “ningún empleado ha recibido su entero salario”. Los servicios de la Franja son “siempre menos accesible”, para obtener permisos para salir es difícil.
Jerusalén (AsiaNews)- “La necesidad de curaciones es muy fuerte. Las personas están ansiosas de ser curadas, si tuviesen los remedios en Gaza o que no pueden pagar”. Lo narra a AsiaNews, Mor Efrat, operadora de la Ong Physicians for Human Rights - Israel (Phri), y autora de un informe sobre la situación sanitaria de la Franja de Gaza, donde viven 2 millones de personas. El informe fue publicado el pasado 4 de febrero.
“Respecto a cuándo hemos publicado el informe la situación “no varió”, comenta Efrat. “Pero, tenemos voces no confirmadas que haya empeorada la provisión de electricidad, que descendió a 4 horas por días”. En el documento, la Ong marca un cuadro preocupante, de una “grave falta” de remedios hasta las huelgas de los operadores sanitarios, que desde hace meses no reciben el salario. En Gaza, el 45% de los fármacos esenciales es “completamente inaccesible”: en este elenco figuran también aquellos necesarios para tratar el cáncer y las enfermedades auto-inmunes y aquellas esenciales a los pacientes en diálisis. Algunos remedios lo diluyen para poder curar a más personas y a los enfermos se les da un tercio o la mitad de la dosis necesaria. Están colapsados también los servicios de laboratorio y hay una “grave escasez de donaciones de sangre”. La instrumentación médica es reutilizada después de la esterilización y los agentes esterilizados están en constante disminución.
Inquieta también falta de la retribución de los salarios a los trabajadores sanitarios: en los últimos 6 meses, ningún empleado recibió el salario entero”. No obstante el acuerdo de unidad entre las dos autoridades, Fatah y Hamas, no hubieron mejoramientos: 6.000 empleados del ministerio de la salud no fueron pagados y 4000 han recibido estipendios reducidos; aquellos retribuidos por la Autoridad palestina han recibido mitad o un cuarto de la paga, de Hamas el 40%. Diversos operadores están realizando algunas huelgas a menudo llegando al cierre de las estructuras hospitalarias.
“Los servicios sanitarios en Gaza son siempre menos accesibles”, narra Efrat. La “clínica mobil” de la Ong, una delegación de médicos (entre 4 y los 8) que se dirige en varias zonas de la Franja para llevar su trabajo de curaciones, se debe confrontar cada vez con alguna necesidad desesperada: “Centenares de pacientes van a hacerse visitar por la delegación, que trabaja todo día, hasta altas horas de la noche, porque los pacientes no dejan de llegar. Necesitan de una contra consulta de una opinión médica, de remedios que en Gaza no se encuentran o que ellos no tienen dinero para pagar”.
El derrumbe del servicio sanitario de la Franja alienta “siempre más personas en pedir permiso para salir de Gaza para curarse”. Pero el paso fronterizo de Rafah en la frontera con Egipto abre raramente y el número de permisos concedidos por Israel no crece: sólo el 50% recibe una respuesta positiva. Puede suceder que los pedidos “no reciban ninguna respuesta” y que el pedido quede “sin respuesta por meses”. Tratamos de protestar por los rechazos de parte del ejército-nos cuenta Efrat-nos confrontamos con ellos y les comentamos la condición médica de los pacientes”. Recientemente, era necesario ayudar a algunas mujeres enfermas de cáncer para obtener el permiso para curarse fuera de la Franja: de 30 a las cuales les habían negado el permiso obtuvimos cambiasen la decisión.
Hoy, las protestas de los palestinos y de Fatah han obligado a Israel a conceder a una mujer poder ir de Gaza a Ramallah, donde la hija de 12 años le harán un trasplante de riñón.. Al inicio, las autoridades concedieron sólo a la jovencita salir de la Franja y las imágenes de la muchachita en lágrimas (v. foto 2) provocaron la ira de los palestinos. Según la Organización mundial de la salud, en 2017 en Gaza murieron 54 palestinos mientras esperaban poder salir para curarse, 46 de ellos tenían tumores.