Taskent, la Corte investigará acusaciones de un periodista que sufrió torturas

Está acusado de sedición. Desde noviembre, los jueces ya no pueden aceptar pruebas que hayan sido obtenidas a través de maltratos. Activista: es un giro positivo.


Taskent (AsiaNews/Agencias) – La Corte de Taskent investigará de acuerdo a las acusaciones de tortura que constan en una denuncia contra los servicios secretos, presentada por un reportero. Los activistas en defensa de los derechos humanos consideran que el proceso del periodista Bobomurod Abdullayev es un “test” para medir las reformas del presidente Shavkat Mirziyoyev.

Ayer, durante la primera audiencia del proceso que lo tiene incriminado por sedición, el periodista se quitó la camisa para mostrar los signos de la violencia padecida, aún visibles sobre su cuerpo. El periodista fue arrestado por los servicios secretos (SNB) a fines de septiembre, acusado de producir material sedicioso con el objetivo de derrocar al gobierno.

Abdullayev afirma que fue sometido a un trato brutal en el período inmediatamente posterior a su arresto. “Lo golpearon en la espalda, en las piernas y en el brazo izquierdo con un tubo de plástico de un metro de largo. La peor tortura fue obligarlo a pasar seis días sin dormir... no le permitían sentarse, ni acostarse”, escribe su abogado, Sergei Mayorov. “La tercera forma de tortura consistió en golpizas en la espalda y en la cabeza utilizando un cable de computador”. La violencia se prolongó hasta el 5 de noviembre, y fue de tal magnitud, que el periodista ayer aún tenía las marcas sobre su brazo izquierdo.

El pedido de evaluación médica y profundización de las declaraciones de Abdullayev fue presentado por su letrado, y recibió el apoyo del procurador general y la aprobación del juez  Zafar Nurmatov. El magistrado aceptó la solicitud, recordando un decreto de Mirziyoyev del pasado mes de noviembre, por el cual se impide a las cortes basarse en pruebas obtenidas por medio de torturas.

Abdurahmon Tashanov, activista por los derechos humanos del grupo Ezgulik, elogió la decisión, afirmando que constituye un “giro positivo” y que “normalmente, la corte no toma en consideración los pedidos del imputado o de los abogados en lo que respecta al uso de torturas”.

Recientemente, el presidente Mirziyoyev se descargó contra los servicios secretos, definiéndolos como “perros locos”, y anunciando su voluntad de poner fin al poder que detentan, entregando a la justicia a cuantos se hayan manchado con torturas.