Desórdenes en Sri Lanka: vigilan mezquitas en la oración del viernes

En la isla todavía sigue vigente el estado de emergencia, y rige el toque de queda en el distrito de Kandy. La policía arrestó a 85 personas implicadas en los episodios de violencia racial y étnica. “Entre los musulmanes hay un fuerte sentimiento de miedo”.


Colombo (AsiaNews/Agencias) – Las autoridades de Colombo han decidido aumentar la vigilancia de las mezquitas en vista de la oración del día viernes, luego de los hechos de violencia perpetrados contra los musulmanes en la última semana, que llevaron a la muerte de tres personas. En tanto, hoy seguirá cerrada la mayor parte de los negocios y actividades comerciales cuyos propietarios son de la comunidad islámica.

En Sri Lanka la situación sigue siendo sumamente tensa, y se teme que estalle una nueva guerra civil. El enfrentamiento está localizado fundamentalmente en el distrito central de Kandy, un conocido destino turístico. Allí, el 5 de marzo pasado, una multitud de cingaleses budistas atacaron e incendiaron un lugar de culto islámico local y varios negocios y viviendas de los musulmanes. La violencia estalló por reacción a la noticia del homicidio de un ciudadano esrilanqués de etnia cingalesa.  Luego de las agresiones, las autoridades declaradon el estado de emergencia en todo el territorio del país y el toque de queda en dicho distrito. Esta última medida de seguridad no impidió que continuaran sucediendo ataques contra la minoría religiosa. Los últimos datos refieren la destrucción de más de 200 propiedades, actividades comerciales, casas y vehículos de miembros de la comunidad musulmana.  

La policía informa que ha arrestado a cuando menos 85 personas involucradas en los episodios de violencia, y que entre ellas estaría aquél que presuntamente habría fomentado la revuelta racial y religiosa. Mientras tanto, el acceso a Internet y a los medios continúa bloqueado, para evitar la difusión de “fake news” (noticias falsas).  

Ayer, Mahesh Senanayake, comandante del Ejército, visitó el área de Kandy y prometió aumentar la presencia militar en los alrededores de las mezquitas de todo el país. El comandante admitió que “los musulmanes tienen miedo de que se produzcan ulteriores ataques durante [la oración] del día viernes. Garantizaremos su seguridad e integridad”.

Sri Lanka es un país donde la mayoría de la población es budista (el 75% sobre un total de 21 millones de habitantes), en tanto los musulmanes representan aproximadamente un 9%. La isla ha quedado marcada por los 30 años de guerra civil entre el ejército y los rebeldes de los Tigres tamiles, que llegó a su fin en 2009. Si bien se ha encarado un difícil proceso de reconciliación nacional, todavía cuesta ponerlo en marcha.