Ya desde esta mañana los palestinos protestan ya sea en Cisjordania como en Gaza. Dura la reacción de la policía: gases lacrimógenos y de estruendo. En Gaza, disparan con balas verdaderas. Peace Now: la dirigencia celebra la muerte de la solución dos Estados. Adel Misk. “Se pusieron del lado de los israelíes, contra la voluntad de los pueblos y sobre todo contra el pueblo palestino”.
Jerusalén (AsiaNews)- A las 16,30 Ivanka Trump descubrió la placa de la nueva embajada americana en Jerusalén, en el barrio de Arnona. A la misma hora, en la Franja de Gaza, se contaban el número de muertos que subió a 41; además de 37 heridos en el arco de 3 horas.
En la ceremonia de apertura Jared Kushner, consejero y yerno del presidente Trump, subrayó el valor de Jerusalén como “centro y lugar sagrado de los hebreos”, criticando las manifestaciones que sucedían detrás de los muros de la embajada y las que suceden desde hace un mes y medio en la Franja de Gaza.
Con una cierta retórica, el Premier Benjamín Netanyahu, gritó: “Presidente Trump, usted ha hecho la historia” e “¡Israel no tiene otro mejor amigo que los EUU!”. Los que intervinieron se pusieron de pie para aplaudirlo.
Mientras tanto, ya desde esta mañana, decenas de miles de palestinos manifestaban contra la nueva embajada, marchando a los largo de la frontera de la Franja de Gaza con Israel y en Cisjordania, por las calles de Ramallah, Belén y Jerusalén misma. Dura la reacción de la policía, que sofoca las manifestaciones con bombas de estruendo y gases lacrimógenos. En Gaza, donde se reportan que hubo también bombardeos, los militares israelíes están utilizando una vez más vals verdaderas, matando a decenas de palestinos e hiriendo a más de 1600. Entre las víctimas hay también menores de edad, entre los cuales un niño de 12 años. Para Kushner, los manifestantes son “parte del problema”.
A aquellos que protestan se unen también algunas organizaciones de la sociedad civil israelí. Para la Ong, Peace Now, la decisión de desplazar la embajada a Jerusalén no hace otra cosa que reforzar las posiciones extremas de ambos frentes, debilitando los pedidos por la paz. “Nuestra voz es crítica-afirma Hagit Ofran, responsable del proyecto ‘Settlement Watch’ de la Ong – en particular cuando la dirigencia celebra la muerte de la solución de los dos Estados. Nosotros debemos hacer sentir nuestra voz, sobre todo cuando las personas están desesperadas y no creen que ya haya alguna esperanza por la paz”.
“No es aceptable que Israel y EEUU hagan lo que quieren”, comenta Adel Misk, activista palestino pacifista, recordando que casi toda la comunidad internacional se sorprendió contra la decisión de Trump. Sólo 56 países han aceptado participar a la ceremonia de la inauguración. “Me maravillo que algunos países como Rumania, que sufrieron una ocupación, participen en una similar ceremonia”.
Parece hecho a propósito-continúa Misk-que justamente en el aniversario de la Nakba, en la cual nosotros (palestinos) pedimos el retorno (de los prófugos). “Se pusieron de la parte de los israelíes, contra la voluntad de los pueblos y sobre todo del pueblo palestino”.