Presidente: Ramadán, mes de misericordia, perdón, salvación
de Sumon Corraya

Ayer se inició en Bangladés el período sagrado de ayuno y oración. El presidente Hamid ruega por el bienestar del país y de sus imanes. Un joven: Con el Ramadán, se eliminan las cosas negativas de mi vida. Se descubren casos de adulteración de la comida destinada al iftar. Secuestran y destruyen miles de mangos.


Daca (AsiaNews) – “Un mes santo de auto-control y de dominio de sí, para obtener el perdón”. Es en estos términos que M Abdul Hamid, presidente de Bangladés, definió el período del Ramadán, que se inició ayer en el país. En su mensaje dirigido a los fieles musulmanes, él afirma: “El Ramadán es el mes de Rahmat (misericordia), Barkat (bendición), Maghfirat (perdón) y Najat (salvación). Éste nos ofrece la oportunidad única de estar más cerca de Alá y de poner en acto la paz y el perdón”.

En su mensaje, el presidente subraya que el ayuno, que distingue este período dedicado a la oración, “ayuda a establecer una cooperación, la concordia y la fraternidad entre ricos y pobres”. Luego, rezó por el bienestar del país y de sus imanes.

Para los musulmanes, el período está marcado por reflexiones sobre la propia existencia y sobre los buenos propósitos, a fin de mejorarla. El joven Rony Talkudar dice a AsiaNews: “Durante el Ramadán, me purifico a través del ayuno y la oración. Elimino las cosas negativas de mi vida. Creo que es el momento mejor del año dedicado a la espiritualidad”.

Según Rony, “todos los musulmanes debieran seguir las enseñanzas del Ramadán y ponerlas en práctica en su vida. Si todos ejerciésemos el auto-control, el auto-dominio y el perdón, nuestro país sería un lugar donde se viviría mejor”. Musfikur Rahim, estudiante de una madrasa [escuela coránica], agrega: “Alá me bendecirá por mi ayuno, oración y vida honesta. El Ramadán es el período mejor para obtener la misericordia de Dios”.

Al mismo tiempo, Rony se queja de que, durante el mes sagrado para el islam, ·hay algún que otro comerciante que tiende a aprovecharse y aumenta el precio de los productos. En otros países musulmanes, el costo de los artículos se reduce, pero en Bangladés, por el contrario, éste aumenta. El motivo es que los funcionarios cobran sobornos e incrementan las actividades criminales durante el Ramadán”.

Prueba de cuán generalizada está la corrupción es el secuestro y la destrucción –ocurrida ayer, por parte de la policía- de miles de mangos adulterados en Daca. No deja de causar sorpresa el hecho de que algunos comerciantes deshonestos hayan adulterado los productos a la venta. Los agentes descubrieron que ellos utilizaban colorantes y aceites para la comida destinada al iftar [el período que comienza tras la puesta del sol, que interrumpe el ayuno, ndr]. Dichas sustancias vuelven los mangos más atractivos a la vista del comprador, pero son dañinos para la salud.