Papa: las Obras misionales, sostén necesario para la evangelización (Video)

En un video-mensaje, Francisco se dirige a la asamblea de las OMP, afirmando que las mismas “garantizan, en nombre del Papa, una equitativa distribución de las ayudas, de modo que todas las Iglesias del mundo tengan un mínimo de asistencia para la evangelización, para lo sacramentos, para sus sacerdotes, seminarios, para el trabajo pastoral y para los catequistas”.


Ciudad del Vaticano (AsiaNews) – Las Obras Misionales Pontificias (OMP) llevan casi 200 años ofreciendo un “sostén a los misioneros que evangelizan, y sobre todo un sostén con la oración, para que el Espíritu Santo esté presente”, porque “es Él quien lleva adelante la evangelización”. Es lo que dijo el Papa Francisco en un breve video-mensaje dirigido a la asamblea que se desarrolla a partir de hoy en la Fraterna Domus de Sacrofano (en Roma) y que se prolongará hasta el 2 de junio.

“Desde los primeros tiempos –fueron las palabras de Francisco- el sostén recíproco entre las Iglesias locales, dedicadas a anunciar y a dar testimonio del Evangelio, ha sido un signo de la Iglesia universal. En efecto, la misión, animada por el Espíritu del Señor Resucitado, amplía los espacios de la fe y de la caridad llegando hasta los extremos confines de la tierra”.

“En el siglo XIX, el anuncio de Cristo recibió un nuevo impulso por la fundación de las Obras Misionales, con el objetivo específico de rezar y obrar concretamente para sostener la evangelización en nuevos territorios. Estas obras fueron reconocidas como Pontificias por el Papa Pío XI, que de este modo quería subrayar de qué manera la misión de la Iglesia hacia todos los pueblos está muy en el corazón del Sucesor de Pedro. ¡Y así sigue siendo! Las Obras Misionales Pontificias hoy siguen continuando este importante servicio iniciado hace ya casi 200 años. Están presentes en 120 países con Directores Nacionales, coordinados por Secretarías internacionales en la Santa Sede”.

“¿Por qué son importantes las Obras Misionales Pontificias? Ante todo, son importantes porque debemos rezar por los misioneros y misioneras, por la acción evangelizadora de la Iglesia. La oración es la primera ‘obra misionera’ -¡la primera!- que cada cristiano puede y debe hacer, y es también la más eficaz, aunque esto no pueda medirse. De hecho, el principal agente evangelizador es el Espíritu Santo, y nosotros somos llamados a colaborar con Él. Además, estas obras garantizan, en nombre del Papa, que haya una distribución equitativa de las ayudas, de modo que todas las Iglesias del mundo tengan un mínimo de asistencia para la evangelización, para los sacramentos, para sus sacerdotes, seminarios, para el trabajo pastoral y para los catequistas. Es un sostén para los misioneros que evangelizan, y es un sostén, sobre todo, con la oración, para que el Espíritu Santo esté presente. Es Él quien lleva adelante la evangelización. Por lo tanto, aliento a todos a colaborar en nuestra tarea común, la de anunciar el Evangelio y sostener a las jóvenes Iglesias a través del trabajo de estas Obras Misionales. Haciendo esto, en cada pueblo, la Iglesia continúa abriéndose a todos, y proclamando con alegría la Buena Noticia de Jesucristo, Salvador del mundo. ¡Gracias a todos, de corazón!”.