Había escrito una carta abierta dirigida a las autoridades, para denunciar la corrupción de algunos funcionarios. Fue arrestado el año pasado, y en julio lo condenaron a 12 años de prisión. Ahora deberá pagar una multa y prestar servicios a la comunidad. Es la primera vez que un tribunal tayiko escarcela a un disidente, tras meses de campañas y presiones internacionales. El periodista presentará una nueva apelación: “No he cometido ningún crimen”.
Dusambé (AsiaNews/Agencias) – Por primera vez, un tribunal de Tayikistán excarceló a un periodista independiente que había sido arrestado por motivos políticos. El hecho sucedió ayer, en una Corte provincial de Sughd. Al salir de los tribunales, Khayrullo Mirsaidov fue recibido con lágrimas de alegría y abrazos, pero también con cierta insatisfacción: el juez confirmó la condena.
En noviembre del año pasado, Khayrullo Mirsaidov escribió una carta abierta dirigida al presidente y al procurador general del Tayikistán, además de al jefe de la región de Sughd, acusando a los funcionarios de la ciudad de Khujand por actividades de corrupción. Fue arrestado el 5 de diciembre siguiente, y el mes pasado Mirsaidov fue condenado a 12 años de prisión por parte de las autoridades judiciales de Khujand. Se lo acusa de malversación de fondos estatales, falsificación de documentos y falso testimonio. En la audiencia de apelación del día de ayer, la Corte regional redujo la condena a una multa de 80.000 somonis (731 euros) y a un período de prestación de servicios comunitarios. Mirsaidov está libre, si bien sigue siendo “culpable” de las acusaciones en su contra.
La liberación se produce tras meses de una fuerte campaña y presiones de parte de la comunidad internacional, incluyendo una declaración conjunta de las embajadas del Reino Unido, Alemania, Francia, los EEUU y la delegación de la Unión Europea. En la web, tanto activistas como periodistas han difundido el hashtag #FreeKhayrulloMirsaidov (que en las últimas horas fue modificado y pasó a ser #KhayrulloMirsaidovisFree), que también fue utilizado por el embajador británico en Dusambé.
Ahora, los mismos activistas reciben la noticia de su excarcelación con sentimientos ambivalentes, puesto que se mantienen las acusaciones en su contra. Mirsaidov también está insatisfecho con la sentencia, que dificultará el desempeño de su trabajo para lograr el sustento necesario para vivir. “Según las Cortes –dijo en un diálogo con Radio Free Europe – yo aún soy considerado un criminal, pese a que no he cometido ningún crimen”. Él está decidido a presentar un nuevo recurso de apelación ante las Cortes de instancias superiores y a continuar escribiendo artículos “reveladores”.