Caritas Líbano: inicia el retorno de los refugiados sirios, pero ‘se necesita tiempo’. Temores por Idlib

Para el p. Paul Karam, la situación permanece problemática y son todavía pocas las familias que volvieron a su patria. Y permanece “incierta” su suerte. Damasco “alienta” las operaciones, pero faltan las condiciones generales de “estabilidad”. Problemas también en Líbano, donde la desocupación y la pobreza es de casi un 40%.

 


Beirut (AsiaNews)- Diversas familias sirias “volvieron” su país de origen “gracias al acuerdo” entre el gobierno libanés y los emisarios de Damasco”, pero “no podemos decir que la situación haya cambiado en modo radical y que la mayor parte haya vuelto”. Es cuanto narra a AsiaNews,  el p. paul Karam, presidente de Caritas Líbano, desde hace años comprometido en la acogida de cuantos huyen de la guerra en un contexto que permanece “problemático”. El deseo de los libaneses-agrega- es que se pueda llegar a una paz estable y duradera, que alivie el repatriación. Pero la emergencia no se resuelve en breve tiempo”.

Ayer centenares de refugiados sirios en Líbano volvieron a su madre patria. Las familias partieron a bordo de numerosos autobús desde las ciudades de Trípoli, en el norte del Líbano, de Nabatieh en el sur y también de Shebaa y de Bourj Hammoud. Las autoridades libanesas “han colaborado en su retorno” coordinando las operaciones con la contraparte siria.

Recientemente el ministro ruso de Defensa, Sergei Shoigu afirmó que Siria está lista para recibir al regreso de un millón de refugiados, gracias a un mejoramiento de la situación en el terreno y a la obra de reconstrucción iniciada en colaboración con Moscú. Afirmaciones que, según muchos observadores y la misma Caritas, aparecen hasta demasiado optimistas analizando la situación en el terreno.

El éxodo de millones de desesperados, que buscaron refugio en el extranjero, en Oriente Medio, Europa. América del Norte y Australia, es una de las consecuencias más graves del conflicto, que desde hace 7 años, ensangrienta a Siria. El Líbano está entre los cuales ha pagado el precio más alto, recibiendo a más de 1 millón de exilados sobre un total de 4 millones de habitantes, que se agregaron a los refugiados palestinos ya desde hace tiempo en el país.

Las políticas de acogida alcanzaron un nivel “insustituible”, poniendo a dura prueba la economía del Estado y la supervivencia de los ciudadanos. Sin embargo, el gobierno y las Ong (también cristianas) gastaron mucho en estos años, trabajando para “proteger, promover e integrar” como lo pidió el Papa en el Mensaje 2018 para la Jornada mundial del emigrante y del refugiado.  

“Entre cuantos volvieron. cuenta el p. Paul-ninguno puede dar noticias ciertas sobre su suerte y si realmente volvieron a sus casas, a sus tierras”. Si bien es verdad que “algo se mueve” y “algunos están volviendo”, la cuestión permanece irresuelta. “En las pasadas semanas-prosigue- diversas familias volvieron a Siria para las festividades musulmanas, para luego volver de nuevo al Líbano, una vez terminadas las celebraciones. El gobierno de Damasco alienta los repatriaciones, pero el camino es todavía largo”.

La ofensiva contra Idlib preocupa por una posible, nueva emergencia humana y por las repercusiones a nivel internacional, con posibles intervenciones del bloque occidental, EEUU a la cabeza. “Siria-subraya el presidente de Caritas- no obstante los primeros intentos de reconstrucción sigue siendo una nación destruida casi por entero, la población vive una situación de inestabilidad y desestabilización. Y la comunidad internacional no está exenta de culpas por no haber sabido gestionar la crisis”.

El p. Paul subraya que se necesitarán “muchos años” para hacer renacer a Siria y también para el Líbano necesitará tiempo para superar las dificultades. “Más del 38% de la población-agrega- está sin trabajo y un porcentaje análogo vive bajo el límite de pobreza. Estamos volviendo atrás en el tiempo, pagando a caro precio las políticas de los otros”. En este contexto la Iglesia libanesa “continúa su propia obra de ayuda”, aunque si se fatiga más en promover proyectos y encontrar financiaciones, porque los fondos y las fuerzas son siempre más limitadas”.