El servicio litúrgico se estaba desarrollando en la Iglesia de Naubasta. La policía debería ser la “guardiana de la ley”, en cambio, “asume una posición influenciada por los prejuicios y una actitud fanática contra la minoría cristiana”. En el Estado indio la red Persecution Relief señaló 93 episodios de persecución.
Nueva Delhi (AsiaNews)- El domingo 2 de diciembre, día en el cual la Iglesia celebraba el primer domingo de Adviento, en Uttar Pradesh unos 150 fanáticos hindúes han asaltado una iglesia e interrumpió la celebración con la complicidad de la policía local. Luego han lanzado un ultimátum a los fieles: o cierran el lugar de culto cristiano, o “sufrirán las consecuencias”. Los denuncia a AsiaNews Shibu Thomas, fundador de Pesecution Relief que se ocupa de defender a los cristianos discriminados en India. Él afirma: “La policía, que debería ser ‘la guardiana de la ley’, no cumple con sus deberes y asume una posición influenciada por los prejuicios fanáticos contra la minoría cristiana”.
La iglesia atacada se encuentra en Naubasta, en el distrito de Kanpur. El activista cuenta que los radicales llegaron agitando banderas naranjas (el color de los nacionalistas hindúes), alabando al dios Ram y gritando eslóganes contra los cristianos. “Sembraron el miedo y el terror en la comunidad”, agrega.
Algunas mujeres presentes en la iglesia pidieron la intervención de la policía, “creyendo que podrían hacer razonar a los fanáticos, dado que era evidente que estaban obrando por ignorancia”. Pero los agentes impusieron la interrupción de las oraciones y pidió a los cristianos que se alejaran. Luego también dispersaron a los alborotadores que, haciendo caso omiso de la presencia de las fuerzas del orden, amenazaron volver la próxima semana.
El Rev. Jeetender Singh, encargado de la New India Church of God, cuenta en la red cristiana que dos días antes del incidente, el inspector local de la policía había visitado la iglesia. En aquella ocasión informó al pastor A.B. Singh que habían presentado una denuncia contra él por presuntas “conversiones forzadas”. Después del ataque de los radicales, refiere, el inspector rechazó aceptar la denuncia de los cristianos.
El grupo cristiano sostiene que “en Uttar Pradesh decenas de iglesias son clausuradas por la fuerza con la ayuda de la policía y la administración”. Según Shibu Thomas, “en muchas ocasiones los agentes acompañan a los fanáticos y a los cronistas, cuando éstos toman de mira un iglesia y deciden cerrarla. En los distritos de Jaunpur, Azamgarh, Kanpur y en otros, más de 20 iglesias fueron obligadas a cerrar. Los policías patrullan los alrededores, están de guardia en el ingreso ed impiden a los fieles reunirse para adorar a Cristo”.
Según la red, en el año 2018 en Uttar Pradesh fueron 93 los episodios de persecución. Frente a las amenazas y al intento de difundir el terror, las Iglesias del Estado indio respondieron con una gran “concentración de la paz” en Varanasi