En un templo de Bangkok, los jóvenes rezan para evitar el servicio militar

Como ocurre todos los años, en abril comienza la conscripción de unos 100.000 muchachos. En caso de no llegar al número anual de voluntarios requeridos, se realiza el reclutamiento militar obligatorio a través de una lotería. El santuario de Ya Nak es un famoso destino de peregrinación para aquellos que buscan su fortuna.


Bangkok (AsiaNews/Agencias) – Esta semana, una gran cantidad de jóvenes tailandeses acudió en tropel a un famoso santuario budista de Bangkok para ofrecer oraciones, con la esperanza de evitar el reclutamiento militar.

En Tailandia, se exige que cada ciudadano de 21 años participe en la conscripción anual. El proceso comienza en abril e implica el reclutamiento de unos 100.000 muchachos durante un período máximo de dos años. Cuando no se llega al número de voluntarios estipulado, se activa el servicio militar obligatorio. Este se lleva a cabo a través de un sistema de lotería, en el cual los jóvenes sacan de una urna un boleto doblado. Mientras un oficial sostiene su mano derecha sobre el hombro del candidato en ansiosa espera, otro militar abre la tarjeta y revela su color interno: rojo, que significa alistamiento; o el tan codiciado color negro.

Para los jóvenes que temen el servicio militar, el santuario de Ya Nak ("Abuela Nak"), ubicado en el templo de Wat Mahabut, se ha convertido en un famoso destino de peregrinación. La estatua de oro que representa a una mujer con largos cabellos negros, sentada con las piernas cruzadas con un niño, Ya Nak, está rodeada de ofrendas florales, carros de juguete y ropa tradicional tailandesa. La leyenda dice que mientras su esposo estaba en el servicio militar, ella murió sola durante el parto.

Entre los que recurren a la imagen sagrada hay transexuales aún no operados, como Pasakorn Raksri. Originario de la provincia de Kanchanaburi, el muchacho debió hacer un viaje de cinco horas para llegar a Bangkok. "Una de mis preocupaciones es mi apariencia física, ya que no es exactamente lo que el ejército está buscando", dice. Otros le rezan a Ya Nak porque tienen compromisos financieros y son la única fuente de ingresos para sus familias. "En casa soy el único que trabaja", dice Thawatchai Saisawang, padre de una niña.

Por último, hay jóvenes que han evitado el servicio militar obligatorio, y regresan al templo de Wat Mahabut para expresar su gratitud. Este es el caso de Utain Kamrit, un trabajador de 22 años. El año pasado, durante la lotería había orado a Ya Nak cuando sólo quedaba un boleto negro entre los rojos de la urna. "Pensé en ella y le pedí que me ayudara", dice el muchacho.