La ley fue aprobada hoy. Desde el 24 de mayo, parejas homosexuales, mayores de 18 años podrán registrar su unión, adoptar hijos biológicos del partner, acceder a las atenciones médicas, heredar propiedades. Prohibidos matrimonios con personas de otros países donde no está reconocida la unión entre personas del mismo sexo.
Taipei (AsiaNews) – La isla de Taiwán, la República de China, se convirtió en el primer país de Asia en legalizar los matrimonios del mismo sexo. El parlamento de la isla aprobó una ley que permite a las parejas homosexuales de registrar su matrimonio, de adoptar hijos biológicos de la pareja, de transferir coberturas médicas, de heredar las propiedades del otro. Desde el 24 de mayo, cada pareja del mismo sexo, mayores de 18 años, podrá registrar el contrato matrimonial en las oficinas municipales, en presencia de 2 testigos.
El lanzamiento de la ley fue aplaudido por diversos miles de manifestantes que desafiando la lluvia se reunieron alrededor de la sede del Parlamento desde esta mañana con carteles, banderas, flores. Frente a ellos, había otros miles de manifestantes contrarios a la ley (Foto 2).
La presidente Tsai Ing-wen inmediatamente se congratuló con la comunidad gay “por ser capaces de ganar la bendición de la sociedad”. La presidente expresó gratitud también hacia “aquellos que tienen credos diferentes”, pero igualmente apoyaron la ley.
Una de las promesas de Tsai en su campaña electoral fue justamente la legalización de los matrimonios homosexuales. La propuesta encontró una gran oposición entre grupos conservadores, entre los cristianos de la isla y entre la gente común.
Según algunos legisladores, la decisión desprecia la voluntad del pueblo. El pasado noviembre, en un referéndum, una mayoría de 7,65 millones de taiwaneses había votado por mantener en el Código civil la definición de matrimonio como unión entre hombre y mujer.
Pero, en 2017, la Corte constitucional decretó que parejas del mismo sexo en Taiwán tienen los mismos derechos para contraer matrimonio y si el Parlamento no hubiese emitido una ley dentro de los 2 años, los matrimonios homosexuales habrían sido aprobados en modo automático.
El único límite en la ley es la prohibición de poder registrar matrimonios con personas de otros países donde no está reconocida la unión entre personas del mismo sexo.