Más de 200 activistas y políticos iraníes reclaman un diálogo “sin condiciones” entre EEUU e Irán

Los que firman la petición viven tanto en la patria como en el exterior y expresan el deseo de una “distensión” con las potencias regionales y los Estados Unidos. Una confrontación no implica rendirse, y con ella se pueden “evitar guerras que nadie desea”. La visita de Abe se da en un “momento apropiado” para relanzar los diálogos. Japón tiene intenciones de seguir comprando el petróleo iraní, a pesar de las sanciones de los EEUU.


Teherán (AsiaNews) - Más de 200 activistas políticos y de la sociedad civil iraníes, que viven en la República islámica y en el exterior, han suscrito una petición para pedir al gobierno de Teherán que entable con Washington “coloquios sin condiciones”. Los promotores subrayan el deseo generalizado del pueblo de una “distensión” con las potencias regionales (léase Arabia Saudita y las naciones árabes del Golfo) y mundiales, sobre todo los Estados Unidos, con las cuales hace tiempo rige una controversia en materia nuclear, así como en armas e influencias en el Oriente Medio.

La escalada de tensión entre Irán y los americanos es uno de los grandes temas de las últimas semanas, además de un factor de temor entre las diplomacias internacionales. El origen del enfrentamiento se funda en la decisión de Trump -tomada en mayo del 2018- de retirarse del acuerdo nuclear (JCPOA) logrado con gran esfuerzo por el mandatario anterior, Barack Obama, y de introducir las sanciones más duras de la historia.

Bajo la mira de Washington -que ha reforzado la presencia militar en el área- se encuentran las exportaciones de petróleo de la República islámica.

En su carta, los 225 firmantes no se ahorran críticas contra la política exterior de la Casa Blanca y de su aliado saudita. Al mismo tiempo, su intención es sacudir a la opinión pública internacional y a las organizaciones independientes para que refuercen las presiones sobre el gobierno de Irán y de los Estados Unidos reclamando una perspectiva de diálogo y de confrontación pacífica.

En los últimos días, el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Khamenei, había rechazado una propuesta de diálogo (con condiciones, y poco concreta) del presidente de EEUU, Donald Trump, la cual fue definida como una bocado “envenenado”. Cuando el enemigo te desafía, agregó “si tú das un paso atrás, él da dos pasos adelante”; por eso, la única respuesta es la “resistencia y el desafío”. “Rendirse -concluyó- es mucho más costoso que resistir”.

Respondiendo a las palabras de Khamenei, los más de 200 activistas iraníes resaltan que “dialogar no quiere decir rendirse”. “Los coloquios sin condiciones entre dos frentes opuestos -agregan- pueden tener objetivos distintos, incluida una gestión de la crisis misma, evitar guerras que nadie quiere y jugar realmente con todas las cartas sobre la mesa”.

Por el contrario, rechazar la oferta de diálogo -siempre que la propuesta sea seria- permitirá que las demás potencias puedan usar a Irán como una carta a su favor, contra los intereses de la misma República islámica. Y la visita diplomática del premier japonés Shinzo Abe (la primera de un líder de gobierno del Sol Naciente en 40 años) -prosiguen- se da en un “momento apropiado” que Teherán deberá aprovechar para emprender este nuevo curso marcado por la mediación entre Washington e Irán.  

Entre los firmantes de la petición figuran Ahmad Montazeri, un líder religioso de Qom, el parlamentario y activista  Ebrahim Asgharzadeh, la socióloga franco-iraní Azadeh Kian, el intelectual Behrouz Bayat, el político kurdo-iraní Jalal Jalalizadeh y la abogada y activista  en favor de los derechos humanos Mehrangiz Kar. A ellos se suma la voz del presidente de la Comisión Parlamentaria de Seguridad Nacional y Política Exterior, Hashmatollah Falahat Pisheh, quien recordó la importancia del diálogo entre Washington y Teherán. Una confrontación esencial, “con la ayuda de Qatar o Irak”, agregó el miembro destacado del Majlis, para impedir que “terceras partes” provoquen guerras que los líderes de los dos países no desean.

En tanto, Japón confirma su voluntad de continuar comprando petróleo iraní, a pesar de las sanciones americanas vigentes. Así lo informa el presidente iraní Hassan Rouhani, luego de un encuentro con el premier nipón Abe durante el primer día de su visita oficial a la República islámica. Asimismo, agregó que Teherán “permanecerá vinculada al acuerdo nuclear, que es importante para la seguridad de la región y del mundo”.