Semarang, religiosas franciscanas ven a lección de escritura ‘social’ (Foto)
de Mathias Hariyadi

En los últimos tiempos. la comunidad OSF de Semarang tuvo dificultades en difundir la propia memoria histórica entre los jóvenes católicos. La superiora provincial pensó resolver el problema a través de un grupo de estudio de 2 días. A la iniciativa tomaron parte también dos religiosas ancianas.

 


Yakarta (AsiaNews)- Entre el 27 y el 28 de julio pasados, 26 religiosas han participado en un laboratorio dedicado a quien ama escribir y desea contar en las redes sociales la experiencia de la Hermanas franciscanas y de la Caridad cristiana (OSF) de Semarang, capital de la provincia de Java Central.

En los últimos tiempos, la comunidad tuvo dificultad en difundir la propia memoria histórica entre los jóvenes católicos, siempre más acostumbrados a las nuevas formas de comunicación y poco propensos a documentarse en los libros. Sor Rosali Prime Hatmani, superiora provincial de las OSF de Semarang, pensó por lo tanto resolver el problema a través de un grupo de estudio de 2 días. 

A la iniciativa, facilitada por el grupo de alfabetización mediática Words2Share.org, tomaron parte 2 hermanas ancianas y otras 3 religiosas de media edad, todas con experiencia en el campo de la enseñanza, que se distinguen por pasión y habilidad en la escritura.

Las religiosas fueron alentadas a poner en práctica el propio talento, a través de ejercicios llamados “ a intentos y errores”. Durante sesiones de trabajo intensivas, los instructores han compartido con ellos también algunos ejemplos de experiencias prácticas. Entre los temas tratados durante el taller había instrumentos sociales “más fáciles de usar” y algunas sugerencias prácticas y algunas sugerencias para romper “el bloqueo mental” que precede la elaboración de los textos. 

Las Franciscanas de la Penitencia se dedican a la instrucción y a la educación cristiana  de la juventud, la asistencia a los pobres, a los sin techo y a los encarcelados, al cuidado de los enfermos. Pertenecientes a la comunidad de Heythuysen (Países Bajos), el primer grupo de 11 religiosas llegó a la gran ciudad portual el 5 de febrero de 1870, después de un duro viaje que duró más de 3 meses. Las religiosas se instalaron en Gedangan, pueblo en el sub-distrito de Tuntang, en este momento son cerca de 300, trabajan en 47 localidades de Indonesia y hasta Timor del Este.