En la Carta pastoral en ocasión de la Navidad, el administrador apostólico de Hong Kong reafirma la necesidad de reconstruir la confianza recíproco entre el gobierno, la policía y la población. Las preguntas del purpurado muy cercanas a las del movimiento anti-extradición y pro democracia.
Hong Kong (AsiaNews) – Con el acercarse de la Navidad, el Card. John Tong, administrador apostólico de la diócesis, pide “a todos detener la violencia” que está sacudiendo y dividiendo el territorio de Hong Kong. En su Carta pastoral en ocasión de la Navidad, él pide también que el gobierno escuche la voz de la gente y realice “una investigación independiente sobre los diversos violentos enfrentamientos entre manifestantes y la policía”. Al final, él espera que Hong Kong sostendrá siempre “los valores de base de la democracia, libertad y estado de derecho”, tratando d reducir el abismo entre ricos y pobres”.
La carta pastoral del Card. Tong fue publicada ayer en el “Sunday Examiner”, el semanario de la diócesis, si bien el mensaje lleva la fecha del 12 de diciembre.
Justamente ayer, el presidente Xi Jinping concluyó su visita a Macao, exaltando a la ex colonia portuguesa y criticando en cambio la situación de Hong Kong . En el reciente pasado Xi elogió a la jefa del ejecutivo Carrie Lam y lo obrado por la policía para mantener el orden en el territorio, censurando el pedido de mucha parte de la población para una investigación independiente sobre el uso excesivo de la fuerza por parte de la policía. En cambio, el Card. Tong, junto a otros líderes cristianos, pide desde hace tiempo una investigación independiente, sobre la línea de cuanto el movimiento anti-extradición y pro-democracia exige desde hace 6 meses.
Después de una explicación sobre la navidad y de la triple venida de Cristo (a Belén, al fin del mundo, en la vida de los testigos), la Carta exhorta a los fieles a “leer la Biblia con devoción”, a “tomar parte activa en la Eucaristía”, a “conducir una vida simple”, viviendo la reconciliación y la atención hacia los pobres.
Luego, recordando la división social y los sufrimientos, también “emocionales” y “psicológicos” vividas por la población de Hong Kong, el Card. Tong afirma: “Con el acercarse de la Navidad, hagamos un pedido de corazón a todas las personas de detener la violencia. Deberíamos darnos un período de calma para reflexionar n profundidad sobre el impacto de nuestros desórdenes sociales y sobre los medios para resolver los presentes obstáculos en un modo humano, en vista de restaurar la paz y curar el cuerpo, la mente y el espíritu de la gente”.
“Una vez más-agrega- alentemos con urgencia al gobierno de la SAR (Región de administración especial) a escuchar la voz del pueblo y realizar una investigación independiente sobre los varios enfrentamientos entre los manifestantes y la policía. Sólo cuando la verdad será conocida se podrán restablecer las bases de confianza recíproca entre el gobierno y el pueblo. Entonces podremos preparar el camino para un diálogo de reconciliación”.
“Esperamos honestamente-concluye el mensaje- que Hong Kong, nuestra amada ciudad, sostendrá siempre los valores de la democracia, la libertad, el estado de derecho y que el abismo entre ricos y pobres pueda ser reducido lo antes posible, que los conflictos puedan ser resueltos y pueda prevalecer la justicia y la paz”.