El Papa a los luteranos: diálogo ecuménico, para profundizar el ‘estar juntos’ de los bautizados

Al recibir a una delegación ecuménica de la Iglesia Luterana de Finlandia, Francisco dijo que “la hospitalidad también forma parte del testimonio común de la fe”. La Semana de oración por la unidad de los cristianos, que comienza mañana, “nos muestra esta virtud ecuménica y, sobre todo, nos la recomienda”.


Ciudad del Vaticano (AsiaNews) – El diálogo ecuménico sirve para profundizar este “estar juntos” de los bautizados, de la comunidad, que no es un mero "estar los unos al lado de los otros ", y ciertamente no es un "estar los unos contra los otros”. El encuentro de hoy, con una delegación ecuménica de la Iglesia Luterana de Finlandia (en la foto), con ocasión de la peregrinación anual ecuménica a Roma, para celebrar la fiesta de San Enrique, patrono del país, fue para Francisco una ocasión para subrayar la importancia del ecumenismo.

Francisco dijo que la celebración del pasado domingo del Bautismo de Jesús, fue la ocasión para recordar nuestro propio Bautismo. “El cristiano es una persona que puede dar gracias por su bautismo; y esta gratitud nos une en la comunidad de todos los bautizados. El ‘bautismo para el perdón de los pecados’, que confesamos en el Credo niceno-constantinopolitano, es también una clara llamada a la santidad”. “Esta gratitud une y ensancha nuestros corazones, los abre a nuestro prójimo, que no es un adversario sino nuestro querido hermano, nuestra querida hermana. La comunidad de todos los bautizados no es un mero ‘estar los unos al lado de los otros’", y ciertamente no es un ‘estar los unos contra los otros’, sino que quiere convertirse cada vez más profundamente en un ‘estar juntos’”.

 “La hospitalidad  - prosiguió - también forma parte del testimonio común de la fe en la vida cotidiana. La Semana de Oración por la Unidad de los Cristianos, que comienza mañana, nos muestra esta virtud ecuménica y sobre todo nos la recomienda”. Al recordar un versículo de los Hechos de los Apóstoles, Francisco agregó: “Nos trataron con una humanidad poco común" (Hch 28,2), se lee en el libro de los Hechos de los Apóstoles refiriéndose a los habitantes de la isla de Malta, que acogieron al apóstol con hospitalidad junto a cientos de náufragos”. “Como cristianos bautizados, creemos que Cristo quiere encontrarnos precisamente en aquellas personas que han naufragado en la vida, ya sea literalmente como en sentido figurado. El que brinda hospitalidad no se hace más pobre, sino más rico. Quien da, recibe a su vez. Efectivamente, la humanidad que mostramos a los demás nos hace misteriosamente partícipes de la bondad de Dios que se hizo hombre”.