Después de la histórica victoria de Tsai Ing-wen, Beijing prepara las armas
de Willy Wo-Lap Lam

Tsai Ing-wen fue re-confirmada con el 57,13% de los votos. Una derrota para Beijing y para las “quintas columnas” que trabajan para ella en la isla. La contribución de las manifestaciones de Hong Kong a la victoria de Tsai. Xi Jinping, derrotado tambi´n él, en búsqueda de nuevas estrategias militares.

 


Hong Kong (AsiaNews) – La asombrosa victoria de Tsai Ing-wen en las elecciones presidenciales de Taiwán es una derrota para China que por años nutrió con muchos beneficios económicos a una “quinta columna” en la isla, que predicase la reunificación y el retorno a la madre patria. Es una derrota también para el presidente Xi Jinping, que siempre cultivó la idea de una reunificación militar de la isla y que en cambio hoy se encuentra delante de una alianza aún más estrecha entre EEUU y Taiwán. En la victoria de Tsai tuvo influencia también el modo en el cual Beijing está tratando a Hong Kong. El análisis del periodista y politólogo Willy Lam. Por gentil concesión de la Jamestown Foundation.

 

Introducción

El pasado 11 de enero, la presidente de Taiwán, Tsai Ing-wen logró una rotunda victoria: fue reelegida conquistando 8 millones de votos, o sea el 57,13% del electorado. un hecho histórico. ¿Cómo reaccionará Beijing?

Hasta ahora, delante del triunfo del candidato del DPP (Partido democrático progresista), teóricamente pro-independencia, la respuesta de Beijing fue más bien no beligerante. El vocero de la Oficina para los Asuntos de Taiwán- a nivel de ministerio-algunas horas después de las elecciones dijo que Beijing “insistirá sobre el objetivo base de la ‘reunificación pacífica (bajo el principio de un país, dos sistemas’”. 

Otro comentario post-electoral de la agencia oficial Xinhua dice que “el continente tiene en mano con decisión la iniciativa en las relaciones bilaterales”. Y por parte del usualmente polémico Global Times, el director Hu Xijin dijo que la sociedad china está “preparada para la guerra contra la independencia de Taiwán”, pero no es todavía el tiempo para una “guerra inmediata” (Xinhua, 12 de enero;  Phoenix TV News, 12 enero; Global Times, 11 enero; South China Morning Post, 11 de enero).

Los observadores de las dinámicas del Estrecho notaron que Xi Jinping, secretario general del Partido comunista chino (PCC)-el funcionario de más alto nivel en el tomar decisiones sobre las cuestiones de Taiwán- estaba amargamente contrariado por los márgenes de victoria de la Tsai y con toda probabilidad el comandante en jefe ordenará una serie de medidas para potenciar “la preparación de la guerra”, restringirá el espacio diplomáticos de Taiwán, sofocará la economía de la isla y sostendrá a la así llamada “quinta columna” en la sociedad taiwanesa (Chinatimes.com, 12 de enero; HK01.com, 11 de enero). La quinta columna se refiere a políticos taiwaneses y hombres de negocios que, si bien profesando que defienden la isla contra la agresión comunista, proponen más comunicación y hasta “diálogos pro-reunificación” con Beijing, a causa de su independencia (financiera u otra) del PCC.

Militares y políticos contra Taiwán

La estrategia militar que el PLA (el ejército de liberación del pueblo) podría usar contra Taiwán es bastante simple: la finalidad es erigir un bloqueo aéreo y marino al menos temporáneo, de tal modo que Taiwán permanezca aislada del resto del mundo. En coincidencia con las elecciones, las fuerzas navales del PLA “Teatro de guerra del Este” realizaron una ejercitación de 5 días, que comprendía también 2 modernísimos de destructores del tipo 052D (Apple Daily.com, 13 de enero). Los resultados de centenares de simulaciones en la computadora sobre una invasión a la isla, mostrando que en los próximos decenios, la marina del PLA (PLAN) necesitará construir al menos algunos grupos de portaaviones. Los portaaviones-junto a las plataformas como los submarinos nucleares- son cruciales para el éxito de un bloqueo de la isla (Mil.sina.cn, 29 de julio 2019; Radio French International Chinese Edition, 29 de julio 2019). La pasada Navidad hubo un tenso enfrentamiento a lo largo de las aguas de Hainan y Taiwán entre el portaaviones de los EEUU, Abraham Lincoln y la del Plan Shandong (Ming Pao, 2 de enero).

Los consejeros de Xi están muy confiados que ya que la diferencial de fuerza militar entre ambas partes se restringe, el Pentágono pensará 2 veces antes de liarse con las siempre más sofisticadas naves militares chinas. 

Una tradicional invasión en una playa de la costa de Taiwán-que podría causar la muerte de miles de personas y llevar a una condena mundial del PCC- no parece posible. Escenarios más probables incluyen el decapitar la dirigencia del DPP, seguida por una tranquila táctica pro-china por parte de la quinta columna escrupulosamente nutrida por años por el PCC (Apple Daily, 13 de enero; Tv.cntv.cn, 8 de enero; Mil.ifeng.com, 3 de abril de 2019).

Según una versión dl war game computerizado, el PLA usará su fuerza de misiles para decapitar la entera dirigencia del DPP. l resultado será un caos inmediato y un pánico difundido, dado que no quedará vivo ningún dirigente o líder. A este punto, representantes de la quinta columna (que podrían incluir a hombres de negocios y políticos taiwaneses-alguno podría decir con caracteres similares a aquellos de Han Kuo-yu, el derrotado candidato presidencial del KMT-Kuomintang) intentarán posesionarse de la arena política. Ellos tratarán de tranquilizar al público diciendo que Xi Jinping no invadirá Taiwán y que China apoyará la economía de Taiwán a condición que los taiwaneses rechacen al DPP y comiencen inmediatamente con el PCC diálogos “públicos y honestos” para la reunificación [1]. Esta y otras tácticas similares están detrás de las políticas económicas preferenciales del valor de millardos de millardos de dólares que Beijing hará llover sobre Taiwán antes que  Tsai Ing-wen subiese al poder en 2016.

La resistencia de Taiwán y la voluntad de resistir

Según un dicho del presidente Mao, la voluntad del pueblo es lo que determina toda gran batalla. La cuestión para Taiwán es: ¿los taiwaneses tienen la voluntad de de resistir a las amenazas y a las adulaciones de Beijing? ¿La quinta columna nutrida por Beijing, que consiste en potentes políticos (especialmente en el KMT) y de parte de la élite económica no es quizás ya fuerte en la isla? Según Yan Jian-fa, vicepresidente de la Fundación taiwanés por la democracia, “Taiwán ya se convirtió en el campo de juego para la quinta columna” (Tw.appledaily.com, 19 de febrero de 2019). Para Tung Li-wen, profesor di Pública seguridad en la Universidad central de policía, la quinta columna se volvió un formidable actor en la política de Taiwán. “Algunas veces se pide coraje en el denunciar y criticar al PCC”, dijo. Un ejemplo está en el hecho que el departamento de propaganda del PCC controla ya diversos periódicos influyentes y estaciones de Tv d la isla (Itn.com.tw, 18 de enero de 2019).

Para muchos académicos y comentaristas de Taiwán, el total apoyo que diversos sectores de Taiwán han manifestado hacia Hong Kong y su reciente campaña política anti-PCC, demuestra que el pueblo taiwanés tiene una voluntad de hierro para contrarrestar las tácticas del Frente unido de Beijing. En todo caso, no hay que olvidar el futuro de decenas de miles de pequeños y grandes inversores taiwaneses depende de la generosidad de Beijing. A fines del mes pasado, Tsai emanó una “ley anti-inflación” (反渗透法, fan shentou fa) para frenar a hombres de negocios, comentaristas y medios de elogiar abiertamente al PCC y pedir “diálogos pacíficos” (Central News Agency, 1° de enero; RTHK.hk, 1° de enero; South China Morning Post, 31 de diciembre de 2019).    

Queda por ver si las temáticas del bienestar- especialmente el mejoramiento del estándar de vida taiwanés medio-permitirá a Beijing continuar ganando los corazones y las mentes de Taiwán. Después de todo Han, el candidato del KMT, criticado por ser pro-Beijing, ganó más de 5 millones de votos en las elecciones presidenciales. Y es evidente que Han tenía un solo punto fuerte: su habilidad de tranquilizar al PCC y persuadir a Beijing para que garantice políticas económicas preferenciales a inversores, compradores, comerciantes, como también a campesino y pescadores taiwaneses (BBC Chinese Service, 31 de diciembre de 2019; Cn.nytimes.com, 10 de junio de 2019). la llamada de atención sobre una sospechosa quinta columna como Han va tomada en serio.

Las relaciones de Taiwán con los EEUU y Hong Kong

Con toda probabilidad, la histórica victoria de Tsai hará que las relaciones ya tensas entre EEUU y China sean más espinosas. Y esto no obstante el hecho que el DPP haya aparentemente abrazado la agencia americana de mantener el status quo en el Estrecho de Taiwán, en cambio d buscar activamente la independencia. Según Xinhua, el triunfo de Tsai se debió al “control de fuerzas oscuras” y a la “intrusión de fuerzas occidentales” en la isla (Xinhua, 13 de enero). Detrás del desafío de la administración Tsai contra el PCC está la promesa del presidente Donald Trump de vender a la isla aviones F-16 y otras armas sofisticadas. El año pasado, las relaciones casi-diplomáticas entre los EEUU y Taiwán fueron elevadas de nivel (China Brief, 31 de julio de 2019).

El día después de las elecciones, Tsai se encontró con William Brent Christensen, presidente del American Institute en Taiwán ( de hecho es la embajada de Washington en la isla). Indicó que “la colaboración Taiwán-EEUU ya había crecido a nivel bilateral a un nivel global”. Ambos casi- dijo- han continuado “ a expandir nuestra cooperación en el campo de la seguridad, la economía y nuestros valores compartidos basados sobre la fundación de la democracia y de la libertad” (Taiwan Presidential Office, 12 de enero).

El mensaje no dijo qué Tsai parece ser: Taiwán ayudará a la política de casi guerra-fría de Washington en el “contener” China anti-democrática. La FASE uno de los acuerdos comerciales entre EEUU y China fue firmado el pasado 15 de enero; la FASE dos de los diálogos comerciales podrían tocar temáticas que incluyen el control d la economía por parte del Partido-Estado chino y puntos difíciles de la geopolítica cuales Taiwán, Xinjiang y Hong Kong.

Las elecciones de Taiwán tendrán también un considerable impacto sobre las relaciones entre Beijing y Hong Kong. Xiang Cheng-hua, profesor de Pública administración en la Culture University de Taiwán, está entre un gran número de observadores los cuales creen que la cruzada anti-Beijing de Hong Kong favoreció inmensamente a la campaña de Tsai. “La experiencia de Hong Kong hizo posible la movilización espiritual del DPP”. dijo a los medios de taiwán. “Y casi todos los jóvenes electores fueron absorbidos (por el DPP)” (United Daily News, 11 de enero). Es significativo que en su discurso de aceptación en la noche después de las elecciones, Tsai agradeció a sus “amigos de Hong Kong” por el apoyo. De todos modos, para el presidente Xi, la “rebelión” de Hong Kong que ayudó a Tsai. lo llevará hacia una política dura hacia la región y administració especial (SAR). Después de todo, Xi y muchos de sus colegas están convencidos que la mentalidad de los residentes de Hong Kong tan anti-PCC, intransigente y anti-patriótica haya amenazado la vitalidad del (principio) “un país, dos sistemas” (China Brief, 10  de diciembre de 2019). Xi ya ha programado planes para promover el nacionalismo en las escuelas de Hong Kong, como también dar poderes a la policía de Hong Kong para controlar las protestas contra el gobierno chino (Radio French International Chinese Edition, 12 de enero; Deutsche Welle Chinese Edition, 12 de enero).

Conclusión

La victoria de Tsai demuestra las imperfecciones de la política de Beijing hacia Taiwán. Pero en general, no hay grandes posibilidades que la administración Xi lo admita. Y esto, no obstante el hecho que en un fórum reciente, a fin de año, realizado por el Global Times, Wang Zaixi, ya vice-director de la Oficina para los Asuntos de Taiwán, admitió en modo indirecto el fracaso de Beijing en el conquistar un gran número de convertidos en la isla. “Conquistar los corazones de la gente y hacer bien el trabajo con las masas fue la divisa del Partido comunista, nuestra especialidad”, dijo Wang en el fórum. “Entonces,¿por qué fracasó frente a nuestros compatriotas de Taiwán? ¿Podemos dar la culpa a ellos?”, notó subrayando que Beijing necesita retomar sus “métodos de trabajo y sus enfoques” hacia la isla rebelde (New York Times Chinese Edition, 9 de enero; Uzbcn.com, 12 de diciembre de 2019).

A inicios de enero, Xi despidió a Wang Zhimin, el director de la Oficina central para las relaciones con Hong Kong-cuya posición es equivalente a la d un secretario del partido para la SAR-por haber gestionado mal las protestas anti-China en la ex-colonia británica. Con toda probabilidad, la Oficina para los Asuntos de Taiwán sufrirá también éste y pronto un cambio del personal en la dirigencia. Sin embargo, por largo tiempo, la política del super-nacionalista Xi fue la de conquistar Taiwán por la fuerza. La probabilidad que él la abandone es muy baja, dado que Xi entiende poco la mentalidad taiwanesa. Además, hay un tradición que un jefe del PCC al vértice debe ser mirado como un duro, para preservar su status de “corazón” del Partido. 

[1] Entrevista del autor con cuatro fuentes a nivel de jefes de oficinas del gobierno, o superiores, que son expertos sobre la crisis del Estrecho de Taiwán.